Una niña de 12 años, embarazada de 24 semanas y en grave estado de salud, se encuentra en un hospital de Managua tras haber sido abandonada por su familia, informó hoy la prensa de Nicaragua.
Según publica hoy El Nuevo Diario, la menor está ingresada en el Hospital Berta Calderón de Managua, donde los médicos que la atienden consideran que sólo una interrupción de su embarazo garantizaría que la niña continúe con vida.
Los médicos, que solicitaron al diario no ser identificados, señalaron que no pueden actuar en este caso porque de hacerlo incurrirían en una pena de cinco a diez años de prisión, según lo establece el Código Penal de Nicaragua.
Los médicos identificaron a la menor como 'Marianita', originaria de Siuna, en el Caribe Norte de Nicaragua, donde quedó embarazada tras ser violada en repetidas ocasiones por su padre biológico, que al divulgarse el caso se suicidó, según la información.
La madre de la niña, que tampoco fue identificada, se niega a cuidar de su hija porque la culpa del suicidio del padre.
Los médicos del Hospital Berta Calderón instaron al Ministerio de la Familia (Mifamilia) a que no permita que envíen a la niña a Siuna, su lugar de origen, porque la madre se niega a cuidarla.
Además pidieron a las autoridades del hospital y del Ministerio de Salud a intervenir en este caso, dada la gravedad del estado de salud de la menor.
Según la fuente, los médicos insistieron en que en el caso de 'Marianita' lo que se debe de hacer es interrumpir su embarazo para darle a la niña la posibilidades de vivir, ya que ellos no pueden tomar esa decisión porque lo prohíbe la ley, mientras cada día que pasa el riego para la menor aumenta.