En la economía estadounidense aumentó la supresión de empleos mucho más que lo previsto, y esta baja mensual inédita llevó la tasa de desempleo a 7,6%, la más alta desde septiembre de 1982, según datos revisados difundidos este viernes.
El descenso de la mano de obra empleada anunciado por el departamento de Trabajo es mayor que el previsto por los analistas, que lo situaban en 580.000 puestos netos.
Las cifras de diciembre fueron revisadas en fuerte alza, con 577.000 puestos perdidos, en lugar los 524.000 anunciados un mes atrás.
Como consecuencia, la tasa de desempleo subió 0,4 punto en relación al nivel estimado antes, alcanzando 7,6% en enero, la cifra más alta desde setiembre de 1992.
"Desde el comienzo de la recesión en diciembr 2007, las pérdidas de empleos alcanzaron 3,6 millones, la mitad de las cuales se produjo durante los tres últimos meses", comunicó el departamento de Trabajo.