jueves, 22 de septiembre de 2011

Durante la reunión que sostuvieron hace 15 días la presidenta Laura Chinchilla y Ottón Solís, fundador del Partido Acción Ciudadana (PAC), no solo se pactó un acuerdo en materia tributaria, sino que ahora también uno de vivienda.

Acceso a crédito para clase media es lo que promueve la iniciativa
Pacto Chinchilla-Solís apunta ahora a vivienda

Unos $588 millones se inyectarían al mercado crediticio durante el primer año, con la aprobación de este proyecto


Durante la reunión que sostuvieron hace 15 días la presidenta Laura Chinchilla y Ottón Solís, fundador del Partido Acción Ciudadana (PAC), no solo se pactó un acuerdo en materia tributaria, sino que ahora también uno de vivienda.
Tal encuentro sirvió para amarrar el apoyo de la bancada oficialista de Liberación Nacional (PLN) al proyecto de ley impulsado por el diputado rojiamarillo Víctor Hernández, quien promueve el acceso al crédito para las personas de clase media que anden en busca de casa.
Al igual que ocurrió con el plan fiscal, el PAC y el Gobierno negocian este tema desde hace meses y la reunión Chinchilla-Solís fue trascendental para alcanzar el compromiso de impulsarlo de manera conjunta.
Desde el año pasado Hernández periódicamente se reúne en Casa Presidencial con el vicepresidente Luis Liberman para ir afinando y modificando algunos aspectos del proyecto de ley que está por ser dictaminado, en una subcomisión de la Asamblea Legislativa.
En la redacción del texto y en los encuentros con el Poder Ejecutivo, también han participado los gerentes de los bancos nacionales, así como miembros de la Cámara de la Construcción y del Colegio de Ingenieros.
“Las negociaciones están por concluir, desde agosto del año pasado que presentamos el proyecto venimos negociando con el Gobierno, el cual nos ha asegurado su apoyo”, manifestó Hernández.
En este sentido, la iniciativa pretende crear un fondo de vivienda, que puede ser administrado por cualquier banco público o privado, cooperativas o mutuales.
El capital para dicho fondo provendría de la colocación de bonos y certificados por parte de las entidades financieras en el mercado bursátil.
La idea es que las instituciones públicas destinen hasta un 15% de sus recursos presupuestados para adquirir bonos de deuda del Estado, a la compra de nuevos títulos de vivienda que se crearían. Se estima que esta medida inyectaría al mercado crediticio durante el primer año unos $588 millones.
El proyecto de ley también contempla que los intereses no sobrepasen la tasa básica pasiva y que no varíe durante los primeros seis años.
Asimismo, propone que el plazo para cancelar el crédito sea mayor para así disminuir la mensualidad.
Además, busca crear otro fondo con los recursos de la Ley de Protección al Trabajador, para que sirvan como una garantía para que las personas interesadas no tengan que aportar una prima del 15%, como actualmente se exige, sino que sea solo del 5% o bien, no sea necesaria.
Sin embargo, aunque la finalidad del proyecto es atender la demanda de la clase media, cualquier persona puede acceder al financiamiento, mientras que el valor de la vivienda no sobrepase los $118 mil.
De momento, el pacto Chinchilla-Solís ha dejado como réditos el apoyo conjunto de las bancadas del PLN y el PAC a dos proyectos de ley: la reforma tributaria, plan estrella de la actual administración, y este proyecto que promueve el acceso a vivienda.
No obstante, ambas agrupaciones niegan que estos acuerdos sean los cimientos para en un futuro no muy lejano crear una alianza partidaria, como en el pasado Liberación la ha tenido con la Unidad Social Cristiana y el Movimiento Libertario.