Entre las prácticas más comunes, además de las ya mencionadas, se encuentran ponerlos a pelear por comida, los hacen pasar frío o calor, las hembras son montadas sobre potros de violación para preñarlas y los amarran con cadenas que los lastiman.
Todas los perros son sometidos a estas prácticas desde que tienen tres meses de edad.
Además, las autoridades del Servicio Nacional de Salud Animal (Senasa) como la veterinaria Laura Loiza y agrupaciones como la Asociación American Stanford confirman que quienes incurren en estas prácticas roban perros de razas pequeñas o toman zaguates o gatos callejeros para usarlos como presa y activar el instinto de caza en los perros.
No solo cualquier raza es utilizada como presa. Según cuenta Joanna Rueda de la Asociación American Stanford, los criadores de perros de peleas usan perros de la misma raza, más indefensos, para que los de pelea “practiquen”.
Según cuenta Rueda, la práctica de peleas de perros no es una novedad, como sí lo es el aumento de la tenencia de perros fuertes por personas irresponsables que presumen del animal para ocultar su falta de autoestima, según indica. La creciente demanda de estas razas provoca que cualquiera tenga acceso a ellos sin que conozcan cómo criarlos y cometiendo actos de maltrato continuos.
El estigma de las razas “peligrosas”
Los expertos en cuido animal concuerdan que no existen razas de pelea ni peligrosas.
La veterinaria Jessica Mora asegura que ninguna raza lo es, sino que existen animales que son sometidos a tal maltrato que suelen ser más agresivos, sin embargo para las peleas, en su mayoría se utilizan razas fuertes como los Pitbull, American Stafford o Rottweiler.
Si bien la veterinaria indica que son perros con una mordedura más fuerte, un chiguagua puede ser más agresivo.
Quien tiene experiencia en las razas Pitbull y Stafford es Rueda, quien en su casa tiene seis perros de estas razas y con los que no ha tenido problemas. Esta rescatistas recibe en su asociación perros de estas razas cuando han sido maltratados y decomisados, así como también de peleas y ella asume la rehabilitación de ellos para luego darlos en adopción.
Nueva ley castigará peleas de perros
Las peleas de perros y todas las prácticas asociadas a este negocio se acabarían una vez que el proyecto de ley Contra Peleas de Caninos aprobado en segundo debate en la Asamblea Legislativa reciba la sanción.
Perro de pelea rescatado y restaurado. Cortesía de ASCR.
Si bien existe legislación en contra las peleas de perros, esta nueva ley viene a asegurarse que quienes incurran en estas prácticas vayan a la cárcel.
El proyecto indica que se impondrá de seis meses a tres años de prisión a quien causare la muerte de un canino mediante peleas de caninos, o competencias de arrastre de peso. Además se sancionará a quien promueva peleas de caninos, o competencias de arrastre de peso con una multa que irá de 4 a 40 salarios base.
Con esta ley se prohibiría la comercialización de perros que sean entrenados para peleas y sus criaderos, precisamente para evitar estas prácticas.
También define una sanción de 150 horas de trabajo comunal a los espectadores.
Los dueños de perros que hayan sido declarados como nocivos por parte del Senasa deberán tener una autorización. Para obtenerla, de acuerdo al artículo 12 del proyecto de Ley, deberán presentar una serie de requisitos, incluidos una copia de la hoja de delincuencia.
Según adelantó la vocera de Senasa en este tema, Laura Loaiza, aun queda por redactarse el reglamento que se realizará de manera que las personas que tengan estas razas y sean responsables no sean perjudicadas.
Recientemente, el Senasa en conjunto a Humane Society International-Latinoamérica (HSI) dispusieron de la línea 8625-6000 para denunciar las peleas de perros. La HSI ofrece una recompensa de $1500 cuando se compruebe el acto ilícito.
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