La caída de ceniza producto de las nuevas erupciones del volcán Turrialba ha provocado que la mayoría de personas recurra a acciones preventivas como el uso de mascarillas para evitar mayores afectaciones en su salud.
De acuerdo con José Rafael Rojas, médico neumólogo, las cenizas volcánicas contienen minerales, en especial sílice que son partículas muy finas con un efecto abrasivo e irritativo para las vías respiratorias y para las conjuntivas del ojo.
Esto lleva a que se den problemas como tos, falta de aire, irritación en la garganta y/o en los ojos, inflamación en la nariz, entre otros.
De acuerdo con José Rafael Rojas, médico neumólogo, las cenizas volcánicas contienen minerales, en especial sílice que son partículas muy finas con un efecto abrasivo e irritativo para las vías respiratorias y para las conjuntivas del ojo.
Esto lleva a que se den problemas como tos, falta de aire, irritación en la garganta y/o en los ojos, inflamación en la nariz, entre otros.
“Pueden causar problemas de irritación de ojos, problemas de rinitis o inflamación en la nariz, dolor de garganta o irritación de garganta, problemas respiratorios como tos, en algunas personas falta de aire y, sobre todo, las personas que más se ven afectadas son los niños pequeñitos, quienes son más sensibles a las partículas que pueden estar en contacto con las vías respiratorias”, explicó el médico.
Además de los menores, se afectan mucho quienes tienen enfermedades respiratorias predisponentes, tales como asma, enfisema, bronquitis crónica o problemas alérgicos crónicos en la nariz, como la rinitis crónica, pues pueden tener cuadros agudos.
Para estos grupos de personas las cenizas se convierten en desencadenantes de irritación e inflamación, por ello, Rojas señala que lo conveniente es evitar la exposición a las cenizas.
“Sobre todo a personas que viven muy cerca de donde se está reportando gran cantidad de caída de ceniza por las corrientes de aire y a quienes están en la necesidad de salir de la casa, lo ideal es que utilicen algún tipo de protección donde las mascarillas más efectivas son unas que se llaman N95”, recomendó.
Además de los menores, se afectan mucho quienes tienen enfermedades respiratorias predisponentes, tales como asma, enfisema, bronquitis crónica o problemas alérgicos crónicos en la nariz, como la rinitis crónica, pues pueden tener cuadros agudos.
Para estos grupos de personas las cenizas se convierten en desencadenantes de irritación e inflamación, por ello, Rojas señala que lo conveniente es evitar la exposición a las cenizas.
“Sobre todo a personas que viven muy cerca de donde se está reportando gran cantidad de caída de ceniza por las corrientes de aire y a quienes están en la necesidad de salir de la casa, lo ideal es que utilicen algún tipo de protección donde las mascarillas más efectivas son unas que se llaman N95”, recomendó.
Pese a que con la caída de ceniza muchas personas afirman que se disparan los cuadros alérgicos, el médico especialista afirma que no se trata de alergias, sino de un cuadro irritativo.
“Si es mucha la ceniza que entra a los ojos, puede causar lesiones a la córnea, entonces, hay que evitar rascarse los ojos. Si hay indicaciones de la Comisión Nacional de Emergencias de que hay mucha caída de ceniza, lo ideal sería quedarse en la casa y cerrar ventanas, y evitar que esas partículas entren en contacto con las vías respiratorias y con los ojos”, mencionó.
Otra recomendación del médico es que al verse expuesto a la ceniza, se cambie la ropa al llegar a su casa, para evitar que se propaguen las partículas.
Si sufre alguna molestia o agravo de su condición de salud tras exponerse a la ceniza y no se recupera con acciones en su hogar, debe acudir a un centro médico donde pueda ser valorado por un especialista.
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