Joel Campbell entró inspirado, y montó un baile junto a Cristian Bolaños quien no se quiso quedar fuera de la fiesta. Bryan Ruiz contribuyó con solo un par de jugadas de lujo y Johnny Acosta, Celso Borges y Campbell se encargaron de marcar los tres goles que nos dieron el gane contra Estados Unidos.
Bastaron 10 minutos para que la Selección de Costa Rica hiciera respetar la casa y de paso cobrara venganza por lo que ocurrió en Denver, Colorado meses atrás.
La afición jugó un papel trascendental desde el primer minuto se metieron de lleno y no dejaron de alentar, situación que al parecer motivo a los nacionales que pusieron alma, vida, corazón y algo más para sacar el resultado.
Algunos aficionados apenas se acomodaban en sus asientos, cuando Acosta celebraba el primer gol y le daba la primera alegría de la noche a más de 4 millones de habitantes.
La fiesta era total y antes de que se jugara el minuto 10, un certero cabezazo de Celso Borges desató la locura en las gradas del nacional.
Costa Rica jugaba bien pero eso no evitó que desde el punto de penal Clint Dempsey descontara el marcador al minuto 42. Cabe destacar que el remate por poco fue detenido por Nava, lo que sin lugar a dudas hubiera hecha perfecta la noche.
No hubo nieve, incluso la lluvia se detuvo en cuanto empezó a rodar el balón ya que no quería ser protagonista en un juego de revancha par los ticos.
Cuando parecía que se complicaban las cosas, la “estrella”, de Costa Rica, Joel Campbell, corrió como nunca y dejó botados a los zagueros norteamericanos y con un ligero toque venció al guardameta Tim Howard, quien solo atinó a ir a sacar el balón del fondo de las redes.
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