lunes, 7 de septiembre de 2015

Video del Escorpion de Rene Higuita. / Exarquero René Higuita elogia a Keylor Navas al afirmar que es un portero "show"

Exarquero René Higuita elogia a Keylor Navas al afirmar que es un portero "show"


Higuita, quien este 7 se setiembre cumple 20 años de haber protagonizado una de las mejores jugadas en la historia (El Escorpión), expresó que ya no hay arqueros que se luzcan en los partidos. 


El exarquero y leyenda de la Selección de Colombia, René Higuita, elogió al guardameta nacional Keylor Navas en una entrevista brindada al Diario El País de Colombia y afirmó que Navas es de los pocos porteros "shows" que quedan en el mundo, junto con el alemán Manuel Neuer. 
Higuita, quien este 7 de setiembre cumple 20 años de haber protagonizado una de las mejores jugadas en la historia ( El Escorpión), expresó que ya no hay arqueros que se luzcan en los partidos. 
Una de las preguntas de la extensa entrevista fue: 
¿Se acabaron los arqueros ‘shows’ en el fútbol actual?
"No creo que haya arqueros de ese tipo ya. Hoy más que nunca se necesita que el arquero sepa jugar en la posición de líbero. Quedan unos cuantos como el alemán Manuel Neuer y el costarricense Keylor Navas, pero no con un estilo marcado como el que yo tenía.  A mí me tocó innovar. Con un arquero como yo se les facilitaba a los técnicos el poder implementar otro jugador de mitad de campo hacia arriba".
Aquí la nota completa: 
Por izquierda una bola abierta que recupera Denis Wise, sobre la marca llega Wilson Pérez, abre la pelota para Jamie Redknapp, la pelota al arco, ¡¡¡la sacó Higuita, una locura, una maniobra increíble, esa bola estaba en el fondo, no me diga más!!!...Definitivamente René nació para hacer cosas raras”. Con la misma emoción de un gol en el último minuto, narró William Vinasco Che, el 7 de septiembre de 1995, la jugada que sería considerada una de las mejores en la historia del fútbol. El protagonista, un ‘loco’ colombiano: René Higuita.
Transcurría el minuto 22 del primer tiempo entre las selecciones de Colombia e Inglaterra  en el estadio de Wembley en Londrés, considerado como el templo del balompié mundial, cuando Redknapp, un chico que se destacaba en el Liverpool y fue convocado por primera vez para su nación, pateó al arco y el arquero rival, René, abrió los brazos, estiró su cuerpo hacía adelante, se suspendió en el aire y pocos segundos después rechazó el balón con los guayos. Un desafió a las leyes de la gravedad. 
Su acrobacia —al mejor estilo circense— años más tarde sería votada como una de las mejores acciones dentro de una cancha. Ni siquiera los goles de Pelé, ni la recogida de Maradona a los ingleses, ni el tanto de volea de Zidane, muchos menos la peculiar ‘elástica’ de Ronaldinho lograron superar la genialidad del guardameta.
Se cumplen el lunes 20 años de la que es catalogada por muchos como una obra maestra. Otros, en cambio, la consideran como un acto de irresponsabilidad. El País abordó al gestor de la jugada para revivir  ese momento que permanece casi que sostenido en el tiempo y en la memoria de quienes disfrutan del fútbol como espectáculo.
Luego de dos décadas de haber hecho la jugada, ¿qué recuerda de ese instante?
El ‘Escorpión’ fue sacado de un juego de niños. Posteriormente se llevó a los entrenos, lo comencé a perfeccionar y después de cinco años decidí hacerlo. Lo que no sabía era dónde, cómo ni cuándo. Es una jugada que sirvió para darme a conocer a mí y a Colombia.
¿Considera que fue una genialidad o una irresponsabilidad?
Esta acción fue una obra de Dios, algo perfecto. Siempre va a existir una opinión dividida y algunos terminaron queriéndome aún más y otros no tanto.
¿Sintió temor de que no lograra realizar bien la acción?
Yo llevaba cinco años practicando la jugada y en ningún momento se me pasó por la cabeza que fuera errar a la hora de golpear el balón.
¿Esa jugada terminó invalidada por el juez de línea?
Al contrario. Yo veo que el juez de línea levanta el banderín para sancionar un fuera de juego, hecho propicio para hacer la acción y si no la conseguía, pues no pasaba nada. Pocos segundos después el línea baja la bandera y es prácticamente quien termina dándole validez a la jugada.
¿Hubo alguien en la cancha que le dijo algo por lo que usted acababa de hacer?
Inmediatamente no. Todos quedaron extrañados, se sintió el murmullo de la gente. Ya en el camerino, cuando terminó el primer tiempo, recuerdo que Hernán (‘Bolillo’ Gómez) pidió aplausos.
¿El ‘Bolillo’ no lo recriminó por esa jugada?
No. Ellos sabían que yo trabajaba serio y en función del equipo.
¿Recibió alguna llamada especial para felicitarlo?
Muchas. Me comentaban que esa genialidad le estaba dando la vuelta al mundo. La gente me manifestaba su admiración por lo que se hizo ese día.
¿Guarda algún recuerdo especial de ese partido?
Conservo el premio que me dieron en Francia en el 2008 cuando distinguieron la jugada como la mejor de la historia del fútbol. Del juego como tal, algunas fotos y videos.
¿El ‘Escorpión’ le sigue generando ingresos económicos por publicidad?
Todavía me sigue dando de comer. En muchas ocasiones me pagan para que repita la jugada. Incluso, la sigo preparando y la idea es mantenerla vigente.
¿Tiene alguna prenda del uniforme que utilizó en ese partido?
Tengo que destapar el baúl porque yo era de esos jugadores que todo lo regalaba. No tengo presente si tengo algo de ese uniforme en particular.
¿Intentó repetir la jugada posteriormente en un partido oficial?
No  se presentó más la posibilidad. Es muy difícil que todos los elementos se puedan presentar para repetir la acción.
¿Se acabaron los arqueros ‘shows’ en el fútbol actual?
No creo que haya arqueros de ese tipo ya. Hoy más que nunca se necesita que el arquero sepa jugar en la posición de líbero.  Quedan unos cuantos como el alemán Manuel Neuer y el costarricense Keylor Navas, pero no con un estilo marcado como el que yo tenía.
Porque usted era un hombre de correr riesgos en el arco...
A mí me tocó innovar. Con un arquero como yo se les facilitaba a los técnicos el poder implementar otro jugador de mitad de campo hacia arriba.
¿A los nuevos arqueros se les prohíbe salirse del molde básico y clásico?
Todos los preparadores de arqueros trabajan para que en la competencia no les marquen goles. Yo tenía un estilo distinto, para algunos no era bien visto, me gustaba arriesgar y a veces se ganaba y otra cuantas no. Traté siempre de aprovechar mi potencial futbolístico para el bien de los equipos donde jugué.
¿La gente en la calle lo identifica con el ‘Escorpión’?
Por supuesto. Me hablan de esa jugada, del gol de tiro libre que le hice a River Plate jugando para Atlético Nacional y no puede faltar el comentario del  gol en contra de Roger Milla en el Mundial de Italia 90.
Hoy en día el aficionado relaciona esa jugada con el famoso comercial de Frutiño...
Claro. Es que después de grabar esa publicidad yo sigo perfeccionando la jugada. Creo que a los únicos que no les gustó el ‘Escorpión’ fue a la gente del comercial porque no me volvieron a contratar... (risas).
¿Usted se inspiró en alguien para ser un arquero de un estilo diferente?
La verdad, no tuve a nadie como referente. Me gustaba ver a Raúl Navarro —guardameta paraguayo de Nacional en los 70—, miraba cómo jugaban los arqueros; y cuando se presentó la posibilidad de debutar, veía que era algo sencillo en el campo.  Tiempo después fue la prensa que empezó a destacar el nacimiento de un cancerbero que hacía cosas diferentes.
¿Ha visto algún arquero que haya intentado imitar el ‘Escorpión’?
Definitivamente no. El fútbol se convirtió en un negocio y de resultados. El arquero de ahora no arriesga como lo hacía yo. Es un jugador más simple y sencillo.
¿Cuál es su actualidad en el fútbol?
Llevo cuatro años en el balompié árabe. Soy entrenador de arqueros del Al-Nassr, conociendo una cultura muy bonita y feliz de seguir activo en este mundo.
A usted lo lleva Pacho Maturana a Arabia, luego él se va, ¿qué lo impulsó a quedarse allí?
Tras el licenciamiento de Pacho del equipo, el único de ese cuerpo técnico que permaneció fui yo. Me dieron la opción de crecer como persona y profesional.
¿Lo sedujo la parte económica o el proyecto deportivo?
Lo que pasa es que yo en Colombia no tenía trabajo para la época. Decían que yo era un técnico muy caro para trabajar, pero nunca me hicieron una oferta concreta. Al-Nassr me brindó el espacio para transmitir mis conocimientos.
¿Extraña la bandeja paisa y la arepa con chocolate?
Si uno quiere salir adelante, tiene que dejar sus apegos e incluso a su familia. Cerrar los ojos y echar para adelante. Acá hay otras cosas que te van llenando en lo personal. La soledad sirve para reencontrarse.
¿Ha recibido algún regalo exótico de los jeques?
(Risas...). Ellos son muy detallistas y especiales. Todo lo que uno recibe al final se queda acá. Lo máximo que he recibido acá es un carro de lujo, pero ese tipo de cosas se quedan aquí.
¿Cómo vivir en una sociedad con una religión tan rigurosa y marcada?
Hay que tener respeto por el ser humano y sus creencias. Así de sencillo.
¿Qué podemos esperar de Colombia en eliminatorias?
Al profesor Pékerman hay que darle respaldo y agradecimiento por todo lo que ha hecho. Ese chicharroncito que tiene el ‘profe’ para armar su equipo, es él solo quien debe resolverlo.
¿David Ospina está un peldaño por encima de los demás pensando en el arco nacional?
Es el hombre de la experiencia, con muchos partidos encima. Camilo Vargas espera la oportunidad. Si son convocados es porque ambos tienen grandes condiciones.
¿Ha perdido espacio el arquero colombiana en nuestra liga local?
Hay muchos foráneos en los equipos de Colombia. Estamos en decadencia no de capacidad, sino de oportunidad.

Un grupo de expertos independientes desacreditó hoy la versión oficial de que los 43 estudiantes desaparecidos el año pasado en el sur de México hayan sido incinerados en un basurero, con el argumento de que la investigación de la fiscalía presenta inconsistencias científicas. Tras seis meses de indagaciones, el grupo designado por la Comisión Interamericana de Derechos Humanos (CIDH), que basó su trabajo en información de las autoridades mexicanas, no sólo refutó la versión de la incineración, sino que señaló también que los estudiantes fueron atacados a tiros directos por parte de la policía en una operación “coordinada y en extremo violenta”.

Ciudad de México, 6 sep (dpa) – 
En enero, la fiscalía dijo que “la verdad histórica” era que los estudiantes fueron detenidos por policías municipales en Iguala (estado de Guerrero) y entregados a un grupo criminal que, al confundirlos con rivales, los asesinó e incineró en un basurero del municipio vecino Cocula entre la noche del 26 y la mañana del 27 de septiembre.
El Grupo Interdisciplinario de Expertos Independientes (GIEI) dijo que en base a las declaraciones contrataron a un perito con el que visitaron el basurero, donde les detalló que para incinerar completamente los 43 cuerpos al aire libre se habría necesitado un total de 60 horas y 30.000 kilos de madera.
“Un inculpado señala que el máximo tiempo que estuvieron ahí fue de 16 horas”, sostuvo el abogado chileno Francisco Cox. “Por todas estas razones el GIEI ha formado la convicción de que los muchachos no fueron incinerados en el basurero de Cocula”, sostuvo.
Los restos fueron enviados a un laboratorio en Austria, donde tras varios exámenes complicados sólo se ha logrado identificar el ADN de uno de los jóvenes a partir de un fragmento óseo carbonizado. Los otros restos son cenizas, lo que dificulta cualquier tipo de análisis.
El caso Ayotzinapa, llamado así por la comunidad en la que se encuentra la escuela normal Isidro Burgos a la que pertenecían los 43 jóvenes, fue un duro golpe para el gobierno de Enrique Peña Nieto y provocó la indignación nacional e internacional.
Los expertos, que iniciaron sus labores en marzo, volvieron a expresar malestar por el ocultamiento de pruebas, como prendas y otros objetos que pertenecían a los estudiantes, y un video del momento en el que los jóvenes fueron detenidos en Iguala.
Asimismo, señalaron que los hechos de Iguala fueron coordinados por una persona aún sin identificar, conclusión a la que llegaron tras numerosos testimonios de involucrados.
“Se trató de un ataque desproporcionado y sin sentido. No fue algo puntual que se da en un momento, sino que transcurre durante varias horas. Hay un nivel de coordinación, tal y como prueba la complejidad de los hechos”, dijo el médico español Carlos Beristáin, quien pidió que se investigue más el caso.
El experto dijo que los hechos de Iguala no sólo dejaron 43 desaparecidos, sino también 180 víctimas directas, seis personas ejecutadas extrajudicialmente y 700 familiares directos que han sufrido las consecuencias.
“Persiste el miedo en la región. Los testigos de los hechos han tenido miedo para hablar sobre lo que pasó”, dijo Beristáin al explicar las dificultades que el grupo enfrentó en las indagaciones.
El informe final de los seis meses de trabajo del GIEI fue presentado en la Ciudad de México ante la prensa y la presencia de los padres y familiares de los 43, que exigen justicia y la presentación con vida de sus hijos.
El GIEI, conformado también por la abogada y socióloga colombiana Ángela Buitrago, la ex fiscal general de Guatemala Claudia Paz y Paz y el abogado colombiano Alejandro Valencia Villa, denunció que ninguna autoridad presente durante la detención y ataque a los estudiantes les brindó protección y agregó que el caso está lleno de contradicciones.
Los expertos pidieron que se continúe la búsqueda de los jóvenes y se brinde justicia a los familiares. Además, recomendó al gobierno crear una comisión para la búsqueda de personas desaparecidas y aprobar “con carácter urgente” una legislación integral sobre desaparición en general y desaparición forzada.
La conferencia terminó con la entrega del informe a los representantes del Estado y a los familiares, quienes coreaban lo que se ha convertido en su lema: “¡Vivos se los llevaron, vivos los queremos!”.