Crédito para micro y pequeñas empresas
· Iniciativa pondrá a disposición de las pymes y productores alrededor de ¢280.000 millones a tasas bajas.
· Crea un impuesto a los créditos de “Banca de Maletín” para fondear herramientas de acceso al crédito del FINADE.
San José, 12 de noviembre del 2014. Esta mañana, las instalaciones del Beneficio el Diamante en Atenas, se convirtieron en el escenario para firmar la Ley 9274, Reforma Integral del Sistema de Banca para el Desarrollo (SBD), la cual le facilitará a los pequeños productores, emprendedores y mipymes, contar con una mayor oferta de recursos y productos financieros.
El SBD es una herramienta que se aprobó en el 2008 para proporcionar aceso a recursos a miles de costarricenses que no contaban con acceso al crédito para producir, pero tuvo que reformarse para hacerlo madurar.
Tanto el Ministerio de Economía, Industria y Comercio (MEIC), como el Ministerio de Agricultura y Ganadería (MAG) y la Asamblea Legislativa participaron en el proceso de negociación y aprobación de la Ley, que hoy se concretó con su firma.
“Es primordial para esta Administración darle el apoyo necesario a iniciativas que conlleven inclusión financiera y económica, para democratizar las oportunidades de progreso de los costarricenses. El Sistema de Banca para el Desarrollo necesitaba remozarse para garantizar un esfuerzo articulado en pro del empresariado nacional”, indicó Luis Guillermo Solís, Presidente de la República.
Las reformas aprobadas permitirán operativizar el “Peaje” Bancario, para que las Pymes, pequeños productores agrícolas y emprendedores tengan más opciones para obtener créditos, al brindarles tasas bajas (iguales a la Tasa Básica Pasiva), con alrededor de ¢280.000 millones provenientes de la banca privada, y un 5% de las utilidades de la banca pública.
Además, las reformas permiten direccionan recursos para los microcréditos, incorporar a los emprendedores como beneficiarios de la Ley, promover una regulación específica y prudencial para los beneficiarios de Ley, y destinar fondos frescos para el Fideicomiso Nacional para el Desarrollo (FINADE) con ¢15.000 millones por año provenientes del impuesto a la Banca de “Maletín”. Este fideicomiso tiene la responsabilidad de operativizar herramientas novedosas para el acceso al crédito productivo de los beneficiarios de la Ley.
“Banca para el Desarrollo es el más importante proyecto en términos de democracia económica e inclusión financiera que ha desarrollado Costa Rica en las últimas décadas. Desde la presidencia del Consejo Rector, haremos lo necesario para cumplir con las expectativas generadas alrededor de la reforma para la potencialidad de la nueva Ley y apoyar a los diferentes sectores.”, expresó Welmer Ramos, Ministro de Economía y Presidente del Consejo Rector del Sistema de Banca para el Desarrollo.
"La Ley que se firma esta mañana, acá en Atenas, es una herramienta en favor de los pequeños y medianos empresarios. Con las reformas aprobadas al Sistema de Banca para el Desarrollo, ponemos a disposición de los microempresarios la caña de pescar que hace tanto ansían y que con justa razón reclamaban. Porque eso es el crédito para el pequeño productor y productora, para los jóvenes interesados en continuar en el campo produciendo desarrollo: la caña con que pescarán ilusiones y las harán realidad", señaló el Ministro a.i de Agricultura y Ganadería, José Joaquín Salazar.
Banca para el Desarrollo ahora cuenta con una unidad específica en el Instituto Nacional de Aprendizaje (INA), que manejará el 15% del presupuesto de dicha institución destinado a los beneficiarios de Ley, y podrá actuar de una forma más ágil; además, se crea un ecosistema más amplio de fomento al sector emprendedor productivo al integrar nuevos miembros activos, -como el Ministerio de Planificación y el Instituto de Fomento Cooperativo (Infocoop)-, que le permita generar más empresas, con mejor índice de competitividad y sostenibilidad durante el tiempo.