Luego que la imposición de las leyes de los Carcelazos y Chorizo, integradas en la Ley 30), impuesta por el presidente de Panamá, Ricardo Martinelli, han ocasionado al menos "oficialmente" un muerto (extraoficialmente se habla de entre cuatro y más de seis, incluyendo dos menores), los diarios nacionales critican duramente al mandatario.
Y La Prensa se lo dijo sin ambages: "Si el presidente Martinelli cree que esos arrebatos autoritarios con los que nos sorprende cada semana serán acatados sumisamente por la ciudadanía, se equivoca".
Ante la práctica de burlarse de la gente, haciéndose el gracioso echando chistes y dando declaraciones grandilocuentes, La Prensa le espetó lo siguiente: "Mal encaminado va si cree que un chiste o una disculpa nos van a distraer de las graves heridas que le ha infligido a la institucionalidad, acumulando poder, removiendo a la Procuradora, imponiendo leyes trasnochadas y humillantes, amenazando adversarios y persiguiendo a periodistas".
Y el influyente diario se hace eco del clamor ciudadano: "Que le quede claro al mandatario y a su Gabinete, que sufragamos a favor de un Presidente democrático y no de un aprendiz de tirano, y demandamos que se legisle con transparencia y que se respeten las opiniones adversas, por fuertes e injustas que le parezcan".
De manera lapidaria, La Prensa cita a un lector del diario, preocupado por el matiz dictatorial de Martinelli: "Como escribió un lector ayer a este diario: "Estamos viendo aparecer a un dictador de derecha, loco por el poder que le dimos con nuestros votos. Persigue y perseguirá a todo el que se le oponga hasta someterlo. ¿Qué haremos?".
Por su parte, luego del muerto ocasionado por la imposición por parte de Martinelli de la Ley Chorizo, el diario Crítica destacó que "La recién promulgada Ley 30 ó 9 en 1 ya está generando sus efectos. En Bocas del Toro hay una rebelión y se dieron ayer enfrentamientos entre los antimotines con saldo de muertos, heridos, detenidos y destrucción de la propiedad privada y estatal".
Tal como lo impuso Martinelli en la Ley Chorizo, la transnacional Chiquita Brands entendió que la Ley 30 los exoneraba de aplicar el descuento de la cuota sindical a sus 4.000 obreros lo que enfureció a los trabajadores, que se declararon en paro y el caos se apoderó de Changuinola, principal punto de operación de la filial local Bocas Fruit Company.
"Esos son el resultado de legislaciones que se introducen a tambor batiente y sobre las cuales los dirigentes del gobierno no analizan las repercusiones sobre la paz social del país. Ahora no queda más que llegar como el bombero a apagar un fuego provocado y a cuantificar las pérdidas económicas y humanas".
Y de manera certera, Crítica pregunta: "¿Qué se hará ahora? ¿Se aplicará la Ley 30 a los responsables del número de muertos que se registraron en los incidentes de ayer?, ¿Se entenderá que un gobierno no puede de buenas a primeras tratar de afectar las organizaciones sindicales, utilizando legislaciones chorizos?".
La Estrella no se quedó atrás y sentenció qe lo que empezó como un paro de 48 horas prorrogables, y que se extendió por falta de respuestas a los trabajadores, ha terminado en un total caos en Changuinola.
El conflicto se le salió de control a las autoridades del Ministerio de Trabajo, e incluso al propio Ejecutivo y ya hay por lo menos una víctima fatal y cien heridos.
Los obreros de la bananera Bocas Fruit Company, afiliados a Sitraibana, reclaman el descuento de la cuota sindical y otros derechos laborales que la empresa suspendió con la aplicación de la recién aprobada Ley 30.
La Estrella sentenció que "lo que deja mal al gobierno es que para calmar la vorágine se anuncie que se sancionará a la compañía porque no descontó la cuota, cuando fue la propia cúpula gubernamental la que abrió la brecha para la libre afiliación sindical".
Editorial de La Prensa
Hoy por Hoy
Estos vientos causarán tempestades. Si el presidente Martinelli cree que esos arrebatos autoritarios con los que nos sorprende cada semana serán acatados sumisamente por la ciudadanía, se equivoca. Mal encaminado va si cree que un chiste o una disculpa nos van a distraer de las graves heridas que le ha infligido a la institucionalidad, acumulando poder, removiendo a la Procuradora, imponiendo leyes trasnochadas y humillantes, amenazando adversarios y persiguiendo a periodistas.
Que le quede claro al mandatario y a su Gabinete, que sufragamos a favor de un Presidente democrático y no de un aprendiz de tirano, y demandamos que se legisle con transparencia y que se respeten las opiniones adversas, por fuertes e injustas que le parezcan. Como escribió un lector ayer a este diario: "Estamos viendo aparecer a un dictador de derecha, loco por el poder que le dimos con nuestros votos. Persigue y perseguirá a todo el que se le oponga hasta someterlo. ¿Qué haremos?".
Editorial de Crítica
Bocas del Toro
La recién promulgada Ley 30 ó 9 en 1 ya está generando sus efectos. En Bocas del Toro hay una rebelión y se dieron ayer enfrentamientos entre los antimotines con saldo de muertos, heridos, detenidos y destrucción de la propiedad privada y estatal.
La transnacional Chiquita Brands entendió que la Ley 30 los exoneraba de aplicar el descuento de la cuota sindical a sus 4, 000 obreros lo que enfureció a los trabajadores, que se declararon en paro y el caos se apoderó de Changuinola, principal punto de operación de la filial local Bocas Fruit Company.
Esos son el resultado de legislaciones que se introducen a tambor batiente y sobre las cuales los dirigentes del gobierno no analizan las repercusiones sobre la paz social del país. Ahora no queda más que llegar como el bombero a apagar un fuego provocado y a cuantificar las pérdidas económicas y humanas.
¿Qué se hará ahora? ¿Se aplicará la Ley 30 a los responsables del número de muertos que se registraron en los incidentes de ayer?, ¿Se entenderá que un gobierno no puede de buenas a primeras tratar de afectar las organizaciones sindicales, utilizando legislaciones chorizos?
Ojala que lo sucedido en Bocas del Toro haga meditar a todos, en particular a los gobernantes. Hay que evitar una explosión social, cuyos resultados serían impredecibles. Hay varios focos de conflictos en el país que deben ser atendidos y no atizar más el fuego.
Bocas del Toro debe retornar a la calma. La perdida de una ó 20 vidas es una tragedia que no tiene justificación. Hay que hacer un alto y entender que el enfrentamiento no conduce a ningún lado, sólo al cementerio o al hospital.
Editorial de La Estrella
Fuera de control
Los que empezó como un paro de 48 horas prorrogables, y que se extendió por falta de respuestas a los trabajadores, ha terminado en un total caos en Changuinola.
El conflicto se le salió de control a las autoridades del Mitradel, e incluso al propio Ejecutivo y ya hay por lo menos una víctima fatal y cien heridos.
Los obreros de la bananera Bocas Fruit Company, afiliados a Sitraibana, reclaman el descuento de la cuota sindical y otros derechos laborales que la empresa suspendió con la aplicación de la recién aprobada Ley 30.
Lo que deja mal al gobierno es que para calmar la vorágine se anuncie que se sancionará a la compañía porque no descontó la cuota, cuando fue la propia cúpula gubernamental la que abrió la brecha para la libre afiliación sindical.
Es necesario devolver la cordura en esta provincia y asegurar la convivencia pacífica; sin embargo, urge actuar con sensatez en un diálogo en el que se reconozcan las fallas de una ley que a todas luces pasó sin la debida consulta.