jueves, 30 de agosto de 2012

Las guías de educación sexual del Ministerio de Educación (MEP) se aplicarán a partir del 2013 y serán obligatorias, pese a la oposición de la iglesia católica y otros credos religiosos, advirtió el ministro del ramo, Leonardo Garnier. La advertencia la hizo Garnier en respuesta a un llamado del obispo de Cartago, José Francisco Ulloa, para que los padres de familia no envíen a sus hijos a esas clases por considerar que las guías tienen un peligros sesgo "herótico y hedonista".


Las guías sexuales van aunque la iglesia se oponga

Redacción
Ministro de Educación, Leonardo Garnier
El ministro Garnier aseguró que la oposición de la Iglesia a las guías sexuales surge de una equivocada lectura de las mismas y advirtió que no hay marcha atrás.
Las guías de educación sexual del Ministerio de Educación (MEP) se aplicarán a partir del 2013 y serán obligatorias, pese a la oposición de la iglesia católica y otros credos religiosos, advirtió el ministro del ramo, Leonardo Garnier.
La advertencia la hizo Garnier en respuesta a un llamado del obispo de Cartago, José Francisco Ulloa, para que los padres de familia no envíen a sus hijos a esas clases por considerar que las guías tienen un peligros sesgo "herótico y hedonista".

Ulloa dijo que no se trata de un boicot, "es parte de la libertad de los padres de familia. Nosotros damos las alertas, los padres son los que juzgarán que hacer con la educación de sus hijos", señaló.
El ministro calificó la posición de la Conferencia Episcopal de "extraña" y dijo que no entiende cómo puede abordarse el tema de la sexualidad sin referirse al placer sexual, como pretenden los jerarcas católicos.
Manifestó que las guías se empezarán a aplicar de todas maneras porque es una forma de prevenir a los jóvenes sobre el riesgo de los embarazos prematuros.
Estudios al respecto señalan que cerca de 15.000 adolescentes quedan embarazadas todos los años, debido a la falta de formación en materia sexual.
Recientemente, la Sala Constitucional determinó que la asistencia a las clases de educación sexual no será obligatoria para los estudiantes, pero que los jóvenes podrán excluirse de esta materia sólo con la solicitud expresa de sus padres.
El fallo se refirió a un recurso de amparo interpuesto por la Alianza Evangélica que pedía la prohibición de las guías sexuales del MEP.

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