| Dinero público a banca privada |
| Escrito por Carlos Roberto Loría | |
| 27.12.2008 | |
Alerta oportunamente el programa radial La Voz del Pueblo que la edición digital del diario Prensa Libre, de Guatemala, Óscar Arias anunció ayer que el Gobierno de Costa Rica se apresta a ayudar a la banca privada a soportar el impacto de la crisis financiera.(http://www.prensalibre.com/pl/2008/diciembre/26/285469.html.) Algo así era de esperar, porque para Su Fraudulencia tiene prioridad garantizar las ganancias y el nivel de vida de los poderosos. El gobierno de la República no debe darle dinero, ni bonos, ni ventajas económicas a la banca privada, si no es a cambio de participación accionaria mayoritaria para el Estado costarricense. Podría ser el momento para enmendar el error de la apertura a la banca privada en este país y del regalo de los depósitos en cuenta corriente, otrora monopolio del Estado, por parte de diputados neoliberales y consabidos cómplices de oposición, manejados como títeres desde la Academia de Centroamérica en 1995. Hoy día los costarricenses no sabemos a quién pertenecen realmente los bancos privados. A preguntas realizadas en el pasado a través de diputados, el Banco Central respondió que no sabe quiénes son los accionistas, que es la SUGEF quien tiene esa información. Pero la respuesta de la SUGEF es que, por limitaciones legales, no puede revelar información obtenida de sus actividades de auditoría y supervisión bancaria. Eso hace que, en la práctica, algunos o incluso todos los bancos privados de Costa Rica puedan pertenecer a un solo accionista o CARTEL, sin que el pueblo y sus dormidos representantes en la Asamblea Legislativa lo sepan. Por más de una década el Banco Central viene siendo manejado por personajes casados con el neoliberalismo, con INCAE y con el Grupo SAMA. De la presidencia de SAMA pasaron alegres Eduardo Lizano y Francisco de Paula Gutiérrez a presidir el Banco Central; lo que es una inmoralidad. Y de la banca privada proceden estratégicos nombramientos en la SUGEF que lejos de velar por la seguridad financiera de los usuarios, responden a añejas lealtades con anteriores empleadores del sector financiero. En otras latitudes ya habría sido removido un presidente del Banco Central que fracasa estrepitosamente en su meta de inflación, mientras crece el desempleo, se estanca la economía, y todos los sectores que no manejan información interna del Central, se ven perjudicados con su terca política de bandas cambiarias inoperantes. Mediante endeudamiento público (bonos) se entregaron papeles a la banca estatal para superar la insuficiencia patrimonial que frena la expansión crediticia de sus bancos. Nadie sabe cómo se asignarán en definitiva esos recursos, pero el anuncio guatemalteco nos hace pensar que es posible que mientras la gente está de fiesta en Zapote, en Rohrmoser se conspire para trasladar una buena parte de esos miles de millones, al sector financiero privado del cual el presidente Arias es socio. ¿O es que le va a regalar bonos a Ortuño y a Baruch? Campanada 357 26 de diciembre de 2008 |
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