lunes, 29 de agosto de 2011

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Cuanto mayor es la satisfacción, mayor es la protección cardiovascular


Llevar una vida satisfactoria, estar contento y satisfecho con ella parece tener un efecto protector frente a las enfermedades cardiovasculares, de acuerdo con un estudio que se publica en European Heart Journal. Mientras que la depresión y la ansiedad han sido reconocidos como factores de riesgo cardiovascular, apenas había datos sobre los efectos beneficiosos de un estado psicológico positivo; ahora, a raíz de un estudio llevado a cabo sobre 8.000 funcionarios británicos, parece que llevar una vida satisfactoria es bueno para el corazón.

Los funcionarios públicos británicos fueron interrogados sobre de siete áreas específicas de su vida cotidiana: relaciones amorosas, actividades de ocio, calidad de vida, trabajo, familia, sexo, y sobre uno mismo. Se les pidió que calificaran su satisfacción en una escala de 1 (muy insatisfecho) al 7 (muy satisfecho). En cada caso se examinaron sus antecedentes en cuanto a muertes relacionadas con patología coronaria, infarto no fatal y angina de pecho durante un periodo de seguimiento de alrededor de seis años.
Trabajo, familia, sexo
Los resultados de la investigación mostraron que los niveles más altos de satisfacción con la vida se asociaban con una reducción del riesgo relacionado con cualquier enfermedades cardiovascular del 13% (después de controlar factores demográficos y otras características de salud). La disminución en el riesgo de enfermedad cardíaca también se asoció cuando existía satisfacción en cuatro aspectos de la vida -trabajo, familia, sexo, y uno mismo (pero no con las relaciones amorosas, las actividades de ocio o el nivel de vida)-. La reducción del riesgo se apreciaba tanto en varones como en mujeres.

"Esta investigación indica que el hecho de estar satisfecho con aspectos de nuestra vida -en particular, trabajo, familia, vida sexual, y la autoestima- es positivo para nuestra salud cardiovascular, independiente de factores de riesgo tradicionales", señalan los investigadores.

Estar casado puede ser cardioprotector


Los hombres que están casados o tienen una pareja estable parecen buscar antes atención médica ante un ataque cardiaco que los solteros, divorciados o viudos, lo que explicaría de alguna manera porque la tasa de mortalidad por eventos cardiacos es menos en los casados que en los solteros, asegura una investigación que se publica hoy en Canadian Medical Association Journal.
Son conocidos los beneficios para la salud de vivir en pareja, especialmente para los varones. Existen muchos datos que demuestran que se ha producido una reducción en el tiempo de acceso a urgencias tras una ataque al corazón. En este trabajo se ha evaluado cómo influye el estado civil en el tiempo que transcurre desde que se experimenta un dolor en el pecho hasta que se acude al hospital.
Los investigadores analizaron los datos de 4.403 pacientes en Ontario, Canadá, que sufrieron ataques al corazón (infarto agudo de miocardio). La edad media fue 67,3 años, y el 33,7% eran mujeres. Casi la mitad de los pacientes (46,3%) fue al hospital a las 2 horas, y el 73,6% llegó antes de las 6 primeras horas. Entre los casados o que vivían en pareja, el 75,3% fue al hospital a las 6 horas de dolor en el pecho en primer lugar, en comparación con el 67,9% solteros, el 68,5% divorciados y 70,8% de los viudos.
Tiempo vital
Los datos, asegura Clare Atzema, del Instituto de Ciencias Clínicas de Ontario, muestran que las personas con pareja estable acuden una media hora de media antes al hospital, tiempo que puede ser de vital importancia. "Dado que la enfermedad cardiovascular es la causa más frecuente de muerte en Canadá y en el mundo occidental, el beneficio a nivel de población es considerable".
Sin embargo, este efecto beneficioso no se refleja en las mujeres casadas o con pareja estable. Los investigadores creen que podría deberse a que las mujeres son más propensas a tomar el papel de cuidador y que instan a sus parejas a buscar atención médica cuanto antes. "El acceso más rápido a una atención médica puede ser una de las razones por las que los hombres casados tienen un menor riesgo de mortalidad cardiovascular que los solteros", señalan los autores.

El ejercicio, aunque poco, es cardioprotector


Las personas que realizan alguna actividad física de intensidad moderada durante 150 minutos a la semana tienen un 14% menos de posibilidades de sufrir una enfermedad coronaria en comparación con los que no realizan ningún ejercicio físico. A medida que aumenta la actividad del ejercicio, el riesgo relativo de enfermedad coronaria es cada vez más bajo.
Los investigadores, del Departamento de Epidemiología de la Escuela de Sanidad de Harvard (EE.UU.), ha visto que observaron que incluso las personas que realizan una actividad física por debajo de las recomendaciones, 2 horas y 30 minutos de ejercicio moderado a la semana, presentan un menor riesgo de padecer patologías cardiacas que aquellos que no realizan ninguna actividad.
«Los resultados del estudio corroboran que el hecho de que se practique un poco de ejercicio esto ya es beneficioso, pero cuanto más, mejor -150 minutos de ejercicio a la semana es beneficioso, 300 minutos por semana es aun mejor», afirma Jacob Sattelmair, coordinador del estudio.
Sattelmair destaca que, a diferencia de otras investigaciones, que analizan también la relación entre actividad física y el riesgo de enfermedades cardiacas, en éste se incluye la evaluación cuantitativa de la cantidad de actividad física que una persona puede necesitar para reducir su riesgo, así como la magnitud del beneficio.
Tres mil estudios
Los investigadores examinaron más de 3.000 estudios sobre actividad física y enfermedades del corazón, e incluyeron 33 de ellos en su análisis. Entre ellos, nueve midieron la actividad física cuantitativamente. «Los primeros estudios dividían a las personas en activos o sedentarios. Los más recientes han comenzado a evaluar la cantidad real de actividad física que un individuo realiza y cómo se relaciona este hecho con el riesgo de padecer enfermedades del corazón", dice Sattelmair. Los resultados del estudio fueron más significativos en mujeres que en hombres.

El chocolate es cardiosaludable


Buenas noticias para los adictos al chocolate. Según un estudio del British Medical Journal (BMJ), que acaba de ser presentado en el Congreso de Sociedad Europea de Cardiología, tomar mucho chocolate puede ser cardiosaludable ya que, según el trabajo, reduce en casi un tercio el riesgo de desarrollar una enfermedad cardíaca.
Los hallazgos confirman los resultados de estudios previos en los que se aventuraba una posible relación beneficiosa entre el consumo de chocolate y la salud del corazón. Sin embargo, los autores reconocen que se necesitan más estudios para comprobar si el chocolate causa realmente dicho reducción, o si puede ser explicado por factores otros no valorados en el estudio.
Según la Organización Mundial de la Salud (OMS), en 2030, casi 23,6 millones de personas morirán a causa de las enfermedades del corazón. Sin embargo, el estilo de vida y la dieta son factores clave en la prevención de las enfermedades del corazón.
Son muchas las investigaciones que han demostrado que comer chocolate tiene una influencia positiva en la salud humana debido a sus propiedades antioxidantes y antinflamatorias. Entre los efectos beneficiosos se incluye la reducción de la presión arterial y la mejora en la sensibilidad a la insulina.
Revisión de estudios
No obstante, la evidencia sobre cómo el chocolate afecta el corazón seguía siendo confusa. Oscar Franco y sus colegas de la Universidad de Cambridge (Gran Bretaña) realizaron una revisión a gran escala de los datos existentes para evaluar los efectos del consumo de chocolate sobre los eventos cardiovasculares, como el ataque cardiaco o accidente cerebrovascular.
Los investigadores analizaron los resultados de siete estudios que involucraron a más de 100.000 participantes con y sin patología cardiaca existente. Para cada estudio, se comparó el grupo con mayor consumo de chocolate en contra del grupo con el menor consumo. Los investigadores tuvieron en cuenta las diferencias en el diseño del estudio para minimizar el sesgo.
Cinco estudios de los estudios analizados mostraron una relación beneficiosa entre los niveles más altos de consumo de chocolate y el riesgo de eventos cardiovasculares. Sus resultados indicaban que «los niveles más altos de consumo de chocolate se asociaban con una reducción del 37% en el riesgo de enfermedad cardiovascular y una disminución del 29% en el de accidente cerebrovascular».
Los estudios no diferencian entre el chocolate negro o con leche e incluían el consumo de tabletas de chocolate, bebidas, galletas y postres.
Por confirmar
Los autores reconocen que los hallazgos deben ser interpretados con cautela, en particular, porque el chocolate comercialmente disponible es muy calórico (alrededor de 500 calorías por cada 100 gramos), por lo que su consumo excesivo puede conducir a un aumento de peso y a un incremento en el riesgo de diabetes y enfermedades del corazón.
Sin embargo, la conclusión de que, dados los beneficios en términos de salud de comer chocolate, las iniciativas para reducir la grasa y el contenido actual de azúcar en la mayoría de los productos de chocolate deberían ser explorados.

Médico desnuda intereses de diputados oficialistas sobre Ley Antitabaco Diputado Aiza denunciado ante la Fiscalía del Colegio de Médicos


El médico y Diputado Luís Aiza Campos fue denunciado ante la Fiscalía del Colegio de Médicos y Cirujanos de Costa Rica por defender a las tabacaleras y obstruir la aprobación de la Ley Antitabaco en la Asamblea Legislativa.
La denuncia fue presentada por el destacado galeno Rodrigo Cabezas Moya, Especialista en Cirugía de Tórax y Profesor de la Escuela de Medicina, Universidad de Costa Rica (UCR).
La llamada Ley del Tabaco responde a la necesidad para que Costa Rica ponga en vigencia el Convenio Marco, que firmó con la Organización Mundial de la Salud (OMS), hace más de dos años.
Cabezas aseguró que contrario a lo que han difundido las tabacaleras, esa ley no prohíbe el fumado ni erradica su cultivo o comercialización.
"Lo que sí hace es tratar de evitar el que personas adquieran la adicción, particularmente los jóvenes, haciendo menos accesibles los cigarrillos como fuera permitir el que se vendan en cajetillas de diez, proteger la salud de los no fumadores y trabajadores que frecuentan restaurantes y bares e impedir que sea permitido el fumar en todos los lugares públicos", añadió.
Explicó que el que quiera continuar fumando puede hacerlo en lugares privados como sus casas, idealmente en sitios distantes de sus familiares, mediante la divulgación de los riesgos que el fumado implica.
Cabezas Moya agregó que la Ley aumenta los impuestos a los cigarrillos pues en nuestro país, el precio de ellos es de los más bajos en el mundo.
"Contrario a lo dicho por las tabacaleras y sus voceros, eso no aumenta el contrabando; el país más reciente en donde esto se ha estudiado es Canadá", afirmó.
El galeno resaltó que contrario a lo dicho por un diputado, no se pierden fuentes de trabajo en su provincia pues la manufactura y distribución de cigarrillos no se prohíbe.
Sin embargo, expresó que "debemos hacer énfasis de que si se perdieran, el gasto en el sistema de salud nacional atendiendo a las víctimas del fumado excede en muchos miles de millones lo poco que hoy la economía recibe de las tabacaleras".
"Si añadimos el costo de las muertes prematuras de fumadores para la economía familiar y nacional, muertes totalmente prevenibles, el balance es negativo para continuar con el estado actual de la situación", valoró el médico.
Además, acusó que la falacia mayor hasta ahora vista es la expuesta por el diputado por Heredia del Partido Liberación Nacional (PLN), Víctor Hugo Víquez, a quien le preocupa la salud de los fumadores si hubiese contrabando de cigarrillos cuya calidad no se conoce.
"Hoy mueren por miles costarricenses que fuman los cigarrillos de calidad conocida, producidos en su provincia por las tabacaleras que con tanto ahínco él defiende", acusó.
De seguido Cabezas Moya cuestionó "¿por qué Costa Rica no ha podido implementar un convenio internacional ratificado por muchos países del mundo, tanto desarrollados como no desarrollados?".
"Existe un "lobby" (cabildeo) muy poderoso y con dinero abundante para difundir sus intereses cual es el de las compañías tabacaleras. Lo que vemos hoy en Costa Rica se ha visto en muchos países del mundo en donde, a pesar de ellos, ese Convenio ha sido ratificado", afirmó.
Cabezas denunció que las caras visibles en este debate han sido los diputados Aiza y Víquez del PLN, "pero existen otros obstaculizando la ley como son los miembros del Partido Libertario en la Comisión de Asuntos Sociales, en donde se ha discutido el tema por estos largos dos años".
"Además, por admisión pública y explícita del Diputado Aiza, la fracción entera de su partido lo apoya en sus votos y las maniobras que él continúa haciendo", denunció.
Dijo que la última acción de votar en contra de un texto consensuado por todas las fracciones, incluida la del PLN, representadas en la Comisión de Asuntos Sociales e introducir otro en donde se permite vender cajetillas de diez cigarrillos y fumar en paradas de buses y de taxis, como si la salud de esos usuarios fuera menos importante que los que frecuentan restaurantes, bares y otros sitios públicos.
"Lo más increíble de toda esta saga es que la cara más visible de la lucha contra la vida y a favor de la muerte es la de un diputado que es médico de por vida y político por unos años", precisó.
"Por esa razón he demandado formalmente al Diputado Luis Antonio Aiza ante la Fiscalía del Colegio de Médicos y Cirujanos por infringir varios artículos del Código de Ética y Moral Médica entre ellos el artículo tercero que dice: "El médico observará tanto en el ejercicio profesional como fuera de él, una conducta acorde con el honor y la dignidad de su profesión ".
Cabezas Moya sostiene que la lucha contra el tabaco ha sido apoyada por la Asociación Costarricense de Neumología y Cirugía de Tórax, cuyos miembros son los médicos que conocen de primero mano los estragos del tabaco.
Dijo que esta lucha la ha difundido la Asociación "no sólo entre sus miembros nacionales sino también a colegas a nivel latinoamericano y ya se han recibido muestras de apoyo, las dos últimas de Chile y República Dominicana".
Cabezas también acusa que la razón principal para que la ley no se vote, son las tácticas empleadas por el Dr. Aiza, "quien una y otra vez ha impedido que el proceso avance".
Reiteró que "Aiza conoce las consecuencias funestas del fumado y los costos a la salud pública y a la economía del país. No obstante, insiste en retrasar su regulación mediante textos substitutivos, los cuales no ayudan en la lucha contra la adicción al tabaco como son el venderlos en cajetillas con menos cigarrillos para hacerlos más accesibles a los fumadores y más grave, a los potenciales fumadores jóvenes. Insiste en permitir el fumado en lugares públicos como son las paradas de buses y taxis".
Igualmente, sostiene que Aiza es irrespetuoso en las relaciones con otros médicos (artículo 46) cuando en declaraciones públicas dijo a una televisora en forma peyorativa que "el Dr. Cabezas es una persona mayor aunque tiene derecho a sus opiniones".

Un Mensaje a la Conciencia


Un Mensaje a la Conciencia
29 ago 11
NUEVE AÑOS PARA ENCONTRARSE A SÍ MISMO
por el Hermano Pablo

Fueron nueve años de su vida, quizá los nueve que pudieran haber sido los más productivos: de los veintisiete a los treinta y seis. Pero fueron nueve años que pasó en prisión. Y no sólo en prisión, sino en el pabellón de los condenados a muerte.
«Tuve que contemplar mi muerte durante nueve años —escribió David Mason— para comenzar a descifrar la vida. Nueve años para comprender el dolor que causé. Nueve años para aceptar responsabilidad por mis crímenes, y nueve años para sentir remordimiento por lo que hice.»
David Mason, quien había estrangulado a cinco personas, pagó su deuda a la sociedad en la cámara de gas un día martes, 24 de agosto. Joven todavía, terminó sus días con fuertes sentimientos encontrados, por un lado lamentando su vida perdida, pero por el otro dando gracias a Dios que había hallado la salvación de su alma. Porque durante esos nueve años encontró a Dios y comprendió la gran realidad ineludible de la justicia humana y la justicia divina.
Uno tiene que preguntarse: ¿Por qué tuvo David Mason que llegar a lo más hondo de su vida, hasta ser destruido, para allí darse cuenta de que la vida tiene valor y de que, sometidos a la voluntad divina, podemos vivir con dignidad?
No es necesario cometer un asesinato, ser condenado a muerte y cavilar durante años tras las rejas de una cárcel para comenzar a vivir de nuevo. En cualquier lugar y en cualquier momento podemos recapacitar y decidir someternos a la voluntad de Dios para disfrutar de la vida al máximo.
Todos nuestros problemas vienen como resultado de descuidar las leyes morales de Dios. «No codiciarás», «No hurtarás», «No darás falso testimonio», «Honra a tu padre y a tu madre», «No cometerás adulterio» y «No matarás» son leyes que se aplican a toda persona de todo tiempo y de todo lugar.
Siempre que cualquier persona —sea quien sea, tenga el trasfondo que tenga, viva donde viva y crea lo que crea— quebrante una o más de estas leyes, sufrirá las consecuencias. Aunque no quiera aceptarlas como ordenanzas divinas, como quiera, si las infringe, sufrirá las consecuencias. ¿Acaso tenemos que llegar a la cámara de gas para descubrir esa clara y visible verdad?
No tenemos que esperar hasta estar en el lecho de muerte para arrepentirnos. Ahora mismo podemos aceptar a Jesucristo como nuestro Señor. Él implantará sus divinas leyes en nuestra vida, e implantará en nosotros el deseo y la fuerza para cumplirlas.