El cierre de la Hexagonal final de la Concacaf no podía ser más dramático para Honduras y Costa Rica, que se juegan su última carta esta tarde por el tercer boleto a Sudáfrica. Ambos jugarán como visitantes y en escenarios muy diferentes.
La Selección catracha, con el regreso de su capitán Amado “Lobo” Guevara, pisará el estadio Cuscatlán, de San Salvador, para medirse a la escuadra de Carlos de Los Cobos, quien ha advertido que su equipo aunque esté eliminado, no servirá de escalón a Honduras para su pasaje al mundial.
Sin embargo, el conjunto de Reinaldo Rueda, está convencido en sacar el resultado, al tiempo que confía en lo que haga Estados Unidos contra Costa Rica. El empate en Washington sería fabuloso para los nuestros y no digamos un triunfo norteamericano. El técnico Bob Bradley ha dicho que quiere ganar para quedar en primer lugar de la eliminatoria al margen de que ya están clasificados.
Los costarricenses que volvieron a la vida en la eliminatoria, a raíz de la derrota de Honduras ante el mismo Estados Unidos, sólo en una ocasión en toda su historia, han conseguido un triunfo en tierras del Tío Sam, por lo que no hay objeción en decir que el favorito es el equipo de las barras y las estrellas.
Honduras con 13 unidades en el cuarto puesto de la eliminatoria, urge de los tres puntos frente a El Salvador y de lograrlo, obligaría a Costa Rica con 15 puntos, a vencer a los norteamericanos, porque en caso de que catrachos y ticos finalizaran empatados con 16 unidades, la clasificación sería para los hondureños, por mejor diferencia de goles en la serie particular.
Los costarricenses ganaron 2-0 en el partido de ida, pero los hondureños se desquitaron en el juego de vuelta de la hexagonal, con una goleada de 4-0.
