miércoles, 9 de septiembre de 2015

Un Mensaje a la Conciencia 9 sep 15

Un Mensaje a la Conciencia
Video | Audio | Nuevo Caso de la Semana
9 sep 15
CUANDO EL SUBMARINO SE HUNDE
por el Hermano Pablo

Llevaba allí cuarenta y nueve años, casi medio siglo, descansando sobre blandas arenas, recostado sobre un flanco en medio del silencio y de la oscuridad. Dentro de él estaban los cuerpos de cincuenta marinos alemanes: la tripulación completa.
¿Qué era? Un submarino alemán de 80 metros de eslora, identificado como U-1226. Fue hundido en acción de guerra frente a las costas del Canadá, y fue descubierto casi medio siglo después. Lo halló el buceador Edward Michaud el 5 de junio de 1993.
El submarino debió de haber sufrido uno de los tantos dramas del mar que en su caso se tradujo en tragedia. Navegando frente a la costa atlántica del Canadá, fue cañoneado en octubre de 1944. Se hundió lenta e irremisiblemente, transformándose en la sepultura de sus cincuenta tripulantes. Pronto lo rodearon el silencio, la oscuridad y la eterna calma del fondo de los mares.
Fue un final trágico para esos cincuenta hombres. No hubo forma de salvarse. Eran prisioneros dentro del casco de acero que terminó siendo su sepultura. Así es la guerra, y así es la vida.
¿Qué hace uno cuando, aunque no se encuentre dentro de un submarino hundido, de todos modos se encuentra dentro de una situación adversa que parece tragárselo vivo? Ve uno, poco a poco, hundirse su vida en el mar de la desesperación, y no hay nada que puede hacer para detener el naufragio. ¿Qué hace uno? ¿A quién acude? ¿Hay alguna solución?
Probablemente la mayoría de nuestras adversidades tienen una causa humana y, por lo tanto, una solución humana. Gran parte del tiempo somos nosotros mismos los que provocamos nuestras tragedias. Volviendo sobre nuestros pasos podemos, muchas veces, hallar dónde y cómo comenzó nuestro mal. Y si en humildad nos despojamos de toda rebeldía y pedimos perdón a quien hemos ofendido, allí queda resuelto nuestro problema.
Sin embargo, otras veces parece no haber solución. Todas las puertas están cerradas y no hay escape. Es en esos momentos y para esas situaciones que tenemos que deponer nuestro orgullo y confesarle a Dios nuestra inhabilidad. La obstinación es nuestro enemigo número uno, ya que no nos deja encontrar a Dios. Y sin embargo, es Él quien puede librarnos del naufragio.
Humillémonos ante nuestro Creador. Dios nos ama. Él sólo espera escuchar nuestra oración. Digámosle: «Señor, te necesito. ¡Ayúdame, por favor!» De hacerlo así, Él nos rescatará.

VIENEN AGUACEROS Y ACTIVIDAD ELECTRICA ASI COMO CONDICIONES VENTOSAS PARA EL PAIS

Condiciones ventosas en el país
y aguaceros vespertinos en el Pacífico Central y Sur
09 de setiembre de 2015

La presencia de un sistema de baja presión en el Océano Pacífico, cerca de las costas centroamericanas, mantiene un patrón  inestable en la región; ello ocasionó una mañana ventosa en el territorio nacional con ráfagas máximas entre 50 y 65 km/h en las montañas del Valle Central y el Pacífico Norte. Así como  nubosidad variable con lluvias ligeras en la Zona Norte y partes altas del Caribe.

Se espera una disminución en la velocidad de los vientos durante la tarde, por lo que se prevé el ingreso de humedad proveniente del Pacífico y la ocurrencia de lluvias fuertes y aguaceros con tormenta eléctrica en el Pacífico Central y Sur, con montos entre 20 mm a 40 mm. Además, hay posibilidad de lluvias aisladas y tormenta eléctrica en el oeste del Valle Central, la península de Nicoya, la Zona Norte y montañas del Caribe, con acumulados entre 5 a 15 mm.

Debido a lo anterior, el IMN recomienda:

ü  Precaución en lugares vulnerables a inundaciones por saturación de alcantarillado, y/o ante el aumento del caudal en ríos y quebradas, además en sectores propensos a deslizamientos.
ü  Prevención a los conductores ante la presencia de bancos de neblina, los cuales podrían reducir la visibilidad, así como por condiciones adversas en las carreteras.
ü  Buscar refugio en caso de escuchar tormenta eléctrica o percibir fuertes ráfagas de viento.
ü  Precaución ante ráfagas de viento fuerte cerca de las nubes de tormenta, así como prevención por posible caída de ramas de árboles, tendido eléctrico entre otros.