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Posiblemente, ha sido uno de los mejores partido de lo que llevamos de Mundial. Un encuentro que seguramente no guste a los
entrenadores, pero que ha sido una delicia para el espectador. Ocasiones, remates, galopadas, emoción...el fútbol que engancha.
entrenadores, pero que ha sido una delicia para el espectador. Ocasiones, remates, galopadas, emoción...el fútbol que engancha.
Camerún salió mucho más enchufada al partido que Dinamarca. Seguro que tuvo mucho que ver el hecho de ser la primera selección con un mach-ball sobre su cabeza y el ambiente generado alrededor de los 'Leones Indomables', con tensiones internas entre el técnico francés Le Guen y algunos de sus jugadores. Un ambiente que puso a Eto'o en la punta del ataque y a Emaná en el once titular.
Apenas trancurridos diez minutos de juego, Camerún recogía los primeros réditos de su ambicioso inicio y de su presión. La defensa danesa jugó con fuego a la hora de sacar un balón y Poulsen, el ex del Sevilla, regaló un balón a los 'Leones Indomables' que Eto'o no desaprovechó. Mal enemigo Eto'o para hacerle un regalo de ese calibre...
Unos regalos que se sucederían a lo largo de todo el primer tiempo por parte de la defensa danesa, con una actuación en conjunto para olvidar.
Sin embargo, de las botas de uno de los defensores daneses daría inició el gol de lo que llevamos de Mundial. El central del Palermo Kjaer largó un extraordinario pase de 40 metros a la espalda de la defensa de Camerún cazado por Rommedahl, quien la puso por bajo para Bendtner para que empujase el balón a la red. Un golazo.
La locura llegó al filo del descanso, unos minutos en los que los dos equipos se olvidaron del rigor defensivo y buscaron la portería contraria como si fuesen sus últimos segundos en el campeonato. A cada golpe de Camerún se sucedía una contra danesa y a ésta, una nueva respuesta de Camerún todavía más furibunda.
Hasta cuatro llegadas en cada portería, dos por bando, sin solución de continuidad. Rommedahl castigó una pérdida de Song en la medular con una cabalgada por la banda y un gran recorte hacia atrás, un disparo al palo de Eto'o en la jugada siguiente, y una incursión en el área camerunesa de Bendtner a la que siguió una contra rapidísima de Emaná, que entró como un cuchillo por el medio de la zaga danesa y no acertó con el disparo. Por cierto, un día triste para Emaná: su Betis seguirá en segunda división la temporada que viene y Camerún se va de Sudáfrica.
Nada más arrancar la segunda parte, Camerún quedaba contra las cuerdas con el golazo de Rommedahl. Dinamarca castigó la banda izquierda, Assou-Ekotto fue un coladero durante todo el partido, con un pase filtrado hacia Rommedahl que resolvió con maestría. El delantero del Ajax recortó a Makoun y la puso en el segundo palo lejos de Hamidou.
Camerún lo siguió intentando una y otra vez hasta el final. Sobre todo, con un disparo cruzado de Emaná que sacó Sorensen y un disparo de Aboubakar que se estrelló en la cabeza de Poulsen cuando el balón se colaba.
Pero Dinamarca resistió el asedio y deja a Camerún fuera del Mundial. Es la primera selección que queda eliminada de forma matemática y no serán fáciles estos días para Eto'o y los suyos.
