Grupo de Cerdas no acepta su derrota
“Las únicas elecciones transparentes son aquellas que nosotros ganemos”
“Las únicas elecciones transparentes son aquellas que nosotros ganemos”, es la consigna que, desde un inicio, ha guiado al grupo de Cerdas con su participación en el proceso electoral de la ANEP.
Desde el principio, la calumnia, la injuria y la difamación han sido sus armas principales para ganar adeptos; y, particularmente, para desprestigiar todo el proceso electoral, atacando inmerecidamente a la Comisión Electoral de la organización. En el actual proceso de conteo manual de votos, la tónica es la misma.
Adicionalmente, quienes representan al grupo de Cerdas en este proceso, de manera constante, realizan todo tipo de maniobras para retardarlo, para dilatarlo, para cuestionarlo radicalmente hasta por lo más absurdo, dando claras muestras de que no quieren que llegue a su término y que no quieren que se emita una declaración final por parte de la Comisión Electoral de la ANEP.
Dentro de sus tácticas dilatorias está la de llegar tarde a la hora oficialmente convocada para el conteo, generando retrasos bastante prolongados. Tan es así que firmaron un acuerdo para que el conteo se realice sin su presencia, siempre y cuando se les den las actas del conteo. En realidad esto del conteo no les importa tampoco, porque apelarán cualquier resultado.
Como si todo ello no fuese suficiente, la prepotencia, la soberbia, la malacrianza, la agresión verbal y psicológica contra los integrantes de esa comisión, es inenarrable. Los insultos y el irrespeto hacia la Comisión Electoral reviste ya características de violencia, pretendiendo la intimidación total de sus integrantes para llevarles al desgaste total y minar su integridad moral, su ética profesional, su estado emocional y su compromiso de terminar este proceso.
La Comisión Electoral es atacada, constantemente, ahí mismo, en el proceso del conteo. Se le agrede acusando a sus integrantes de fraudulentos, de corruptos, de vendidos, y de otros epítetos impronunciables.
Al detectar los representantes de la tendencia TRABAJO, en el conteo de este sábado 15 de octubre, señales de lo que podría ser un chorreo de votos en las mesas de la Municipalidad de San José, que podría dar pie para su anulación, la reacción agresivísima del representante del grupo de Cerdas no se hizo esperar.
Los “abanderados” de la transparencia y los enjuiciadores sumarios del supuesto “fraude”, temblaron ante la posibilidad de que todas estas acusaciones se volvieran su propio boomerang.
Fue tal la furia del representante del señor Cerdas, el señor John Vega, que, con total desparpajo, amenazó, abiertamente, al Presidente de la Comisión Electoral, con “echarle” encima a los trabajadores de tal institución, en una clara manifestación de chantaje político intimidatorio para evitar que “sus” mesas, “las mesas de Cerdas”, reciban el más mínimo cuestionamiento.
Aunque en privado, algunos de los representantes de Cerdas, aceptan que nosotros, los y las anepistas de corazón de la tendencia TRABAJO ganamos las elecciones; pretenden llevar a la ANEP a la paralización total, al descrédito absoluto, casi que a su propio exterminio.
Las acciones del grupo de Cerdas en contra de la existencia misma de la ANEP, nos recuerdan (según nos lo indican los más viejos de estar en la organización), lo acontecido en el año 1984, cuando el grupo perdedor de las elecciones de la ANEP de ese momento, no aceptó su derrota e hizo alianza con el gobierno de Luis Alberto Monge Álvarez, llevando a nuestro querido sindicato casi al borde de su destrucción total.
El comportamiento del grupo de Cerdas, según lo constatamos por su desenvolvimiento a lo largo de la campaña y durante el conteo manual de votos, muestras grandes similitudes con lo que le pasó a la ANEP en el año 1984. ¡Qué curioso!, por decir lo mínimo.
La situación del conteo manual de votos se agrava por cuanto los integrantes de la Comisión Electoral deben volver a sus respectivos trabajos este martes 18 de octubre, al vencérseles las licencias sindicales que les fueran otorgadas para este proceso. Se esperaba que el conteo terminase este lunes 17.
En realidad, el grupo de Cerdas nunca creyó en este proceso electoral. Desde el inicio han venido hablando de apelarlo y llevarlo a sede judicial. Para el grupo de Cerdas el proceso es “fraudulento” y sin fundamento alguno, en el propio conteo, lo han indicado. Por dicha ha quedado constando en actas tan temeraria aseveración. Su consigna única es la de que “Las únicas elecciones transparentes son aquellas que nosotros ganemos”. Punto. Lo demás es” fraude”.
Como tendencia TRABAJO no sabemos qué pasará a partir de esta fecha con nuestra querida organización; la cual, seguramente, entrará en caos total, al manifestarse problemas como los siguientes: a) imposibilidad de emitir más cheques; b) impago de la planilla del sindicato; c) ilegalidad de las acciones sindicales en proceso; d) imposibilidad de firmar nuevas convenciones colectivas de trabajo ya listas, como la del Canal 13-SINART; e) paralización total de la organización en su acción cotidiana; f) atraso en el pago de las obligaciones financieras (créditos), g) atraso en el pago a la Caja; etc., etc. Tal y como sucedió en 1984.
En próxima comunicación compartiremos con usted nuestra interpretación sobre este comportamiento del grupo de Cerdas, a la luz de los pretendidos cambios de lugar en su papeleta que quieren hacer; en función de que las reglas electorales de la ANEP, aprobadas por ellos mismos, así como lo que ordena al efecto el propio Estatuto de la organización, dejarían por fuera a sus más “connotadas” personas candidatas, pues no se cuidaron bien en la ubicación de las mismas, para efectos de nombramientos por cociente y subcociente. Es más, han modificado su propia papeleta en tres oportunidades y no sabemos si todos y todas quienes integran la misma, lo saben.
Quienes somos de la tendencia TRABAJO no estamos con la violencia. No somos violentos. Rechazamos la violencia que representa la injuria, la calumnia y la difamación; rechazamos la violencia que representa ocupar y encadenar locales; rechazamos la violencia verbal y la violencia psicológica; rechazamos la violencia del chorreo de votos; rechazamos la violencia de la manipulación de trabajadores para fines electorales; rechazamos la violencia que pretende acabar con nuestra querida ANEP.
Hacemos un llamado a los y a las anepistas de corazón, de la tendencia TRABAJO, para que salgamos en defensa de la organización.
Hacemos un llamado a los y a las anepistas de corazón, de la tendencia del grupo del señor Cerdas, que sabemos son la mayoría y que no quieren que la ANEP sea destruida.
SALGAMOS EN DEFENSA DE LA ANEP y que dejen contar los votos
Esté atento a nuestro llamado a acciones en próximas horas
Tendencia TRABAJO
Porque llevamos a la ANEP en nuestro corazón