El triunfo de la selección argentina por 3-1 sobre México, que le dio al equipo albiceleste el
pasaje a cuartos de final del Mundial, desató festejos en todo el país sudamericano.
EN BUENOS AIRES...
El primer gol polémico de Carlos Tevez lo gritaron dos veces. Respiraron más tranquilos cuando Gonzalo Higuaín marcó el segundo tras una definición que se les hizo eterna y anticiparon la fiesta antes del pitazo final con el derechazo letal de Tevez para sellar el triunfo 3-1 el domingo ante México por los octavos de final del mundial.
A miles de kilómetros de distancia, los hinchas argentinos vivieron el partido con la misma intensidad que las 11 "fieras" de Diego Maradona frente a una pantalla gigante colocada en un parque en el centro de Buenos Aires desafiando el frío y la lluvia.
"Volveremos, volveremos, volveremos otra vez a ser campeones como en el 86", fue el hit entonado por los fervorosos fanáticos tras el final del duelo. Argentina fue campeón mundial en 1978 y por última vez en 1986.
"Aguante Argentina, esta vez se nos da", gritó eufórico Juan Carlos Zbinden, de 27 años, mientras golpeaba con fuerza un bombo. A su lado, sus pequeños hijos con los rostros pintados con pintura celeste y blanca soplaban cornetas y saltaban sin comprender muy bien lo que sucedía.
"Este equipo tiene mística, va a llegar lejos", apuntó el hombre.
Tras el final, miles se concentraron en el Obelisco de Buenos Aires, otros salieron a dar vueltas por la ciudad en sus autos haciendo sonar las bocinas o celebraron desde los balcones. En cada ciudad del país se repitió la misma postal de celebraciones multitudinarias.
"Estamos contentísimos, este mundial es nuestro. No importa Alemania, no importa nadie", se ilusionó Guillermo Noriega, de 22 años, con la indumentaria clásica del hincha albiceleste: camiseta del seleccionado, bandera y gorro de arlequín.
El próximo obstáculo será el poderoso seleccionado teutón, el mismo que frustró a los sudamericanos hace cuatro años, también en cuartos de final.
La tarde gris de domingo se prestaba para seguir el partido en los hogares, pero "cábalas son cábalas", contó Sofía López, abrigada de pies a cabeza, quien como sucedió en los partidos anteriores siguió a la selección frente a la pantalla de la plaza San Martín de esta capital.
El pasto embarrado por la intensa lluvia que cayó desde la mañana obligó a que los hinchas siguieran el duelo de pie, exponiéndose a más de un resbalón ante cada salto en momentos decisivos del partido como cuando el mexicano Carlos Salcido estrelló un remate en el travesaño.
Y unos cuantos rodaron por el piso con el cabezazo de Tevez, en clara posición adelantada. Gol que gritaron dos veces con una sonrisa cómplice luego de ser convalidado por el árbitro pese a los reclamos mexicanos.
Higuaín les trajo tranquilidad y Tevez, el más apoyado por los hinchas durante los 90 minutos, terminó de armar la fiesta.
"México parecía que nos iba a complicar, pero otra vez la suerte estuvo de nuestro lado. Alemania será bravo, pero confío que llegaremos a la final", vaticinó Darío Leto, de 65 años, antes de llevar a sus nietos a festejar al Obelisco.
EN MAR DEL PLATA...
Más de 7.000 personas se dieron cita esta tarde frente al monumento de San Martin, ubicado en pleno centro de la ciudad de Mar del Plata, para festejar el triunfo del seleccionado argentino.
Apenas culminó el partido comenzaron a sonar en la ciudad las bocinas de los autos, petardos, bombos, gritos de euforia "Argentina", "Diego, Diego", y el sonar de la populosa "vuvuzela".
El centro de Mar del Plata se vistió de celeste y blanco, autos y motos que circulaban con banderas flameando, en tanto que otros hacian los mismo caminando.
Ya habían transcurrido más de dos horas de la finalizacion del partido de Argentina contra Mexico y los marplatenses seguían festejando el pase de Argentina a cuartos de final, en la que deberá enfrentarse con Alemania.
EN SAN SALVADOR...
Gran algarabía desató en los jujeños el triunfo, que en gran número se agolparon a las calles Lavalle y Belgrano, en pleno centro de la 'Tacita de Plata'.
Con camisetas, gorros y banderas, nadie se quiso quedar afuera de la fiesta albiceleste y los más fanáticos cantaron, bailaron y alentaron a los jugadores y a su entrenador Diego Maradona, que lograron el pase a los cuartos de final del Mundial de Sudáfrica.
Las distintas arterias se fueron copando de automovilistas que improvisaron caravanas y algunos hasta llevaron sus mascotas ataviadas con los colores albicelestes.
El puente Lavalle debió cortarse al tránsito durante el partido, ya que una pantalla gigante gratuita transmitió las imágenes en directo, y al igual que en bares, peñas y algunos locales que abrieron sus puertas el público siguió las alternativas del partido.
En La Quiaca también la euforia se apoderó de la tranquila ciudad y allí el epicentro fue la plaza Centenario, donde el fútbol reunió a toda la familia que siguió la transmisión en directo.
EN VIEDMA...
La calle Buenos Ares y la avenida Costanera, donde se ubica la fuente Pucará frente al Río Negro, son los sitios elegidos para las masivas concentraciones de público.
Apenas terminó el partido se escucharon más de 20 bombas de estruendo que sonaron en distintos puntos de la ciudad, y de inmediato se poblaron de vehículos de todo tipo las avenidas 25 de Mayo, José María Guido y Zatti, que vinculan los barrios con el centro.
Los puentes carreteros, que unen Viedma con la vecina Carmen de Patagones, también registraron un tránsito muy fluido, por lo que las policías camineras de Río Negro y Buenos Aires dispusieron un operativo de seguridad y prevención de accidentes.
EN CÓRDOBA...
Ya unas 15.000 personas, ataviadas con todo lo que los identificara con los colores celeste y blanco, estuvieron en el lugar siguiendo por pantallas gigantes especialmente instaladas para esta jornada, el desarrollo del juego en Sudafrica.
Una vez concluido el partido, que aseguró el pase del seleccionado nacional a cuartos de final, bombas de estruendo, desde todos los puntos de la ciudad se hicieron sentir, mientras automovilistas y motociclistas haciendo flamear banderas argentinas, tocando las bocinas recorrían las calles, en busca del punto de concentración.
En ese sitio y con más de 20.000 personas - mayoría jóvenes-, cantaron y saltaron abrazados, entremezclándose hinchas de los diversos equipos, como de Talleres y Belgrano, archirrivales, pero el domingo unidos en el festejo por la selección nacional.
Camisetas, gorros, cornetas vuvuzelas, matracas, pitos, todo de celeste y blanco, se entremezclaban en la alegría de los cordobeses, que extendían el festejo, trabándose en tránsito vehicular en la tarde de un domingo soleado en la capital cordobesa.
La fiesta se multiplicaba en todos los puntos de la provincia, y en particular en las localidades de Justiniano Posse, de donde es Martín Demichelis; en La Para, de Mario Bolatti; en Altos de Chipión, de Nicolás Burdisso; de Laborde, donde nació Walter Adrián Samuel y el barrio Residencial San Roque, en la ciudad de Córdoba, de Javier Pastore.
EN BAHÍA BLANCA...Los habitantes de la ciudad de Bahía Blanca junto con las localidades de la región del sur bonaerense salieron en forma espontánea a las calles, tras la victoria de la selección.
Los festejos se extendieron desde el Palacio Municipal, ubicado en Alsina 35, hasta el mítico Teatro Municipal, lugar elegido para continuar con la alegría de la victoria del equipo argentino.
En Tres Arroyos los festejos se llevaron a cabo en el centro frente al Palacio Municipal, ubicado sobre la avenida Rivadavia y San Martín, en pleno centro de la ciudad.
Las banderas argentinas, las camisetas y la alegría por continuar en el Mundial de Sudáfrica se extendió además a las localidades de Punta Alta, Tornquist, Médanos, Coronel Suárez, Coronel Pringles y Coronel Dorrego, entre otras, donde los festejos como es tradicional se llevaron a cabo en las plazas principales y frente a las municipalidades.
EN SAN LUIS...Miles de puntanos invadieron esta tarde las calles en toda la provincia de San Luis festejando el triunfo de la selección argentina y el epicentro de los festejos es la Plaza Pringles en la ciudad capital.
También multitudinarias caravanas de automóviles, motos y bicicletas recorren las calles en todas las ciudades de la provincia, según informó la policía provincial.
En las principales localidades del interior provincial, al igual que en la capital, se montaron pantallas gigantes en las plazas públicas, en clubes y escuelas, y todos los lugares estuvieron dosbordados de público.
EN CATAMARCA...
Tal como sucedió en los tres últimos partidos de la selección Argentina, nuevamente los catamarqueños, masivamente salieron a las calles tras el contundente triunfo ante México.
La "clásica" y "popular" esquina de Sarmiento y República, frente a la Casa de Gobierno y la Plaza 25 de Mayo, se colmó de catamarqueños que, eufóricos, festejaron el triunfo argentino con camisetas celestes y blanca, gorros al tono, bombos, las originales "vuvuzelas", bufandas, camperas, el canto de `Dale Campeón`, y todo tipo de elementos distintivo de la selección.
EN ROSARIO....
Más de diez mil rosarinos desataron hoy su alegría por el triunfo del seleccionado argentino ante el de México frente al Monumento a la Bandera, convertido en una gran tribuna de festejos.
Con banderas, vuvuzelas, cornetas y pelucas celestes y blancas los jóvenes y las familias aprovecharon la tarde del domingo para reunirse de a miles en el centro de la ciudad, bajo la aglutinadora consigna "el que no salta es un inglés".
La gente llegaba caminando, en motos y en autos, y los colectivos cuyo recorrido pasa por el lugar transitaban abarrotados de hinchas argentinos gritando por las ventanillas.
Los semáforos de la avenida Belgrano, frente al Monumento, no fueron útiles para ordenar el tránsito esta tarde pero sí sirvieron de tribuna a los más exaltados, que no trepidaron en subirse para agitar sus banderas.