Diario Extra - 'El Gobierno no sabe hacer las cosas y se nos pegan las pulgas'
Los escándalos por la separación de diputados del Frente Amplio han acaparado la atención sobre el partido, más que acciones de denuncia, o proyectos partidarios en el Congreso.
Primero la renuncia del exdiputado Ronal Vargas vinculado a un proceso de supuesto acoso sexual, ahora la separación del diputado Carlos Hernández tras enfrentar una denuncia por agresión doméstica, y las constantes disconformidades de la legisladora Ligia Fallas, quien analiza apartarse de la agrupación.
El abogado ambientalista, Edgardo Araya, intenta articular la bancada en ese escenario, y además con la sombra de ser tildados como los aliados del Gobierno.
Araya además conversó con DIARIO EXTRA sobre cómo se proyecta la agrupación para convencer al electorado de cara al 2018.
¿Cómo articular una fracción, con situaciones tan complejas como la de Ligia Fallas y Carlos Hernández?
-Lo que uno hace como jefe de fracción, es tratar de articular. Esto que llaman jefe de fracción es mentira. Tal vez antes en otras épocas el jefe decía vamos por aquí, hoy esto no sucede ni en el Frente Amplio, ni en ningún otro partido, actualmente uno termina siendo un vocero, un coordinador. Uno trata de que los diputados estén con los insumos necesarios para lograr los consensos para ir hacia un punto que se considera estratégico, eso no significa unanimidad, nunca en ninguna fracción. Respeto mucho los criterios de doña Ligia, no comparto algunas de las posiciones que tiene, pero es parte de un partido democrático y que permite la discusión interna. En cuanto al proceso de Carlos, no estamos acostumbrados, no habíamos aprendido a manejar una situación como la que le pasó, y que implica una separación provisional.
La fuerza de un solo diputado, como fue el caso de José María Villalta, no se ve reflejada en la bancada que ahora tienen, ha capturado más la atención los escándalos ante la posibilidad de perder diputados ¿Cómo lo analiza al ser jefe de bancada?
-Primero habría que ver si José María Villalta hubiese logrado la aprobación del proyecto para ponerle limite a las pensiones de lujo, habría que ver si un solo diputado hubiese podido influir, nosotros lo logramos porque tenemos 9. Creo que si algo tenía José María que no tiene el partido es proyección mediática, pero no porque nosotros hagamos menos cosas que él. No podemos evitar percibir que Mario Redondo siendo un único diputado dice una cosa y sale en todas las televisoras de este país, y nosotros que hemos estado llevando adelante proyectos no se trasmite lo que hacemos. José María lo que tiene es una posición muy fuerte de denuncia. El punto es buscar la razón por la que no nos dan pelota, hemos tratado de afinar el tema de comunicación, tratar de utilizar mucho las redes sociales. Lo hemos intentado para rodear lo que percibimos como un bloqueo.
El Frente Amplio se ha ganado el título de aliado del Gobierno…
-El contexto político no es el mismo, no es lo mismo tener a Liberación Nacional de Gobierno, y con lo que venía arrastrando Liberación en dos periodos, cada semana salía un acto de corrupción. En ese contexto, y si Liberación hubiese ganado nuestra posición hubiese sido distinta. Siempre ha habido un intento, esto es un cambio, no es Liberación, hay una expectativa, hay unos sectores que son muy progresistas en el Gobierno, tampoco hay que hacerle mucho coro.
¿Ese “chance” que le han dado al Gobierno les ha pasado la factura?
-Indudablemente, pero es eso o hacerle juego al PLN. Este Gobierno ha mostrado algunos avances en materia de incorporar algunos sectores excluidos de la población, pero efectivamente es un Gobierno que no ha sabido hacer las cosas bien y entonces se nos pegan las pulgas. Vea lo perverso, se habla de que somos cercanos al Gobierno, ojalá el Gobierno nos hiciera caso en algo, las pulgas se nos pegan en las metidas de pata del Gobierno, pero no estamos en la capacidad de influir.
¿José María Villalta le ha hablado de algunas recomendaciones?
-Yo creo que nosotros no hemos sido buenos en el tema del control político, y eso hay que reconocerlo, ¿por qué José María se distinguió por el tema de la denuncia? porque era un referente, y la gente llegaba con las denuncias.
¿Cómo evalúan empezar a desmarcarse del PAC, como una fuerza que quiere gobernar este país?
-No es una situación como la que vivió don José Merino o el mismo José María. No podemos negar que hay visiones de mundo coincidentes con el PAC, es complicado. ¿Entonces no vamos a apoyar Fraude Fiscal sólo porque dejen de vernos cercanos al Gobierno? ¿Hemos disminuido nuestro control político, porque es este Gobierno? No; creo que lo que debemos hacer es acentuar nuestras posiciones, nuestra visión, y tratar de convencer a la gente de que esa es la visión que más le conviene, pero no podríamos oportunistamente abandonar las cosas en las que creemos. ¿Renta? El impulso para gravar la verdadera renta es una propuesta del Frente Amplio. No estamos siendo gobernados por los mismos por los que José Merino levantó la voz, que puedan estar cometiendo errores parecidos es otra historia, en eso no vamos a ser complacientes
¿Les molesta que el PAC esté perdiendo la oportunidad de convencer sobre el cambio?
-Sí, nos da mucha cólera, mucha rabia de observar cómo se ha dilapidado la oportunidad histórica que tuvo de ser un gobierno de transición, de plantar cara a los grandes intereses que han manejado a este país, pero que muchas veces bajan la cabeza, les hablan golpeadito y se sientan. Sí, nos da rabia, es el contexto político en el que estamos
¿Les obliga aún más a romper las concepciones negativas sobre el Frente Amplio?
-Lo que estamos tratando de demostrar a la gente es que nosotros sí somos un partido que tiene vocación de gobierno. Muchas veces se le ha achacado al FA que es un partido de denuncia, lo que estamos tratando de demostrar es que tenemos vocación de gobierno. Para gobernar no lo puede hacer excluyendo sectores. Es injusto porque ahora pereciera que la corrupción nació con el PAC, y Liberación levantándose y diciendo, sabiendo uno como está la Fiscalía inundada de cosas. Somos una oposición responsable.
Se ha especulado que usted podría ser una nueva figura presidencial ¿Se lo han propuesto internamente?
-Yo no voy a negar que en las redes sociales la gente dice cosas, a mí me parece que hay una candidatura casi que natural en el Frente Amplio, la de don José María. Considero que es la persona que lo conoce más gente, que ha generado más confianza, me parece que hay un camino avanzado, una campaña, la gente lo conoce. Para mí si vamos a hablar de candidaturas presidenciales, sería de José María Villalta como una candidatura natural.
¿Pero sí se lo ha propuesto la dirigencia?
-No hemos empezado la renovación de estructuras, hasta ahora va a empezar. El tema de las asambleas cantonales, de los nuevos delegados, a mí me parece que no hay que distraerse aún del trabajo que hay que hacer en la Asamblea Legislativa. Me parece contraproducente lo que le está pasando en la Unidad, porque por ejemplo que Rafael Ortiz diga que es candidato a la presidencia, ya su trabajo en la Asamblea lo van a ver en función a una candidatura, ya le quitas intimidad a tu trabajo. No vamos a negar esa realidad, hay gente que ha dicho que debería aspirar, Pero es un tema que no deberíamos estarlo hablando ahorita, imagine el daño a la influencia que el Frente Amplio podría tener en la agenda fiscal que aún falta por discutir, si se centra en un tema de candidaturas, postulaciones, perdemos fuerza porque entonces todo se va a medir en función de que aquel está echando para el saco.
En la anterior campaña se metió mucho miedo de que es un partido de izquierda ¿Cómo pretenden corregirlo?
-El Frente Amplio es de izquierda en el tanto quiere que haya mayor desarrollo social, mayor distribución de la riqueza, que el trabajador, los sectores no sean explotados, y cada proceso social es único, el peor error es comparar con Nicaragua u otro país. Porque además no nos comparan con Uruguay, donde tiene 15 años de ser gobernados por la izquierda y se llama Frente Amplio, y nadie habla del trabajo y cómo está viviendo Uruguay y es de izquierda. Como todo proceso se cometen errores, y también tienen virtudes, el nuestro incluido. El Frente Amplio es una propuesta para Costa Rica, en el contexto del país, quien pretenda meterle miedo a la gente con ejemplos de otros países, simplemente se aprovecha de la misma ignorancia de la gente. Claramente el contexto es absolutamente distinto, y hemos demostrado que estamos en estas reglas del juego.
De las últimas encuestas, el partido no se refleja con tanto apoyo en relación con la última campaña presidencial. ¿Cómo lo evalúan?
-El Frente Amplio hoy es más grande como partido, como militancia, como estructura. La avalancha, la ola que se formó en la candidatura de José María Villalta iba más allá del Frente Amplio. Es un tema que incluso mucha gente que votó y que probablemente no comulgaba con los principios del partido, era por otra cosa, representaba una novedad, una cara fresca que, hacía una propuesta distinta. En esa desidia que había surgió como una propuesta interesante. Pero el Frente Amplio, jamás en el tamaño que tenía cuando empezó José María hubiese podido llevar a la gente a las urnas, la gente fue a votar casi que por sí misma. Ahora sí tenemos estructura, hoy somos más grande como partido.
¿Cuánto ha crecido el Frente Amplio?
-Somos más grandes que antes estructuralmente, eso es lo importante de tener estructura, prácticamente en todos los cantones del país tenemos comités que están trabajando, ahora tenemos regidores, tenemos una alcaldía. Yo creo que en el fondo la misma gente de Liberación sabe que el asunto es con nosotros, la capacidad que tendríamos de organizarnos y levantar una campaña no sería nada despreciable.
Uno de los elementos con los que se atacó su propuesta es la estabilidad económica, la huida de empresas si ustedes llegasen a gobernar …
-¿Por qué el empresariado de este país se va a ir porque el Frente Amplio llegue al poder? Acaso hemos dicho en algún momento que vamos a estatizar los medios de producción, quién está hablando de eso, quién con unos deditos de frente no se va a dar cuenta que lo único que se hace es hundir al país, entrar en un caos y flaco favor le haces a tu proyecto político. Es suicida pensar en una situación de esas. ¿Quiénes se tienen que preocupar? Los que no se ajusten a la normativa ambiental, laboral, pero tienen que preocuparse desde ya, porque la normativa está ahí. Es nuestro enorme pleito con la actividad piñera. Me dicen, ¿está en contra de la actividad piñera? No, estamos en contra de que se contaminen las fuentes de agua, los ríos, el suelo, que se explote al trabajador, que se intoxique, que se le obligue a pasar horas bajo el sol sin ninguna protección. Probablemente tendríamos una inspección de trabajo más fuerte, un Ministerio de Ambiente que no sea la cenicienta que es hoy. Si usted se fija en la repartición de presupuestos, los ministerios que menos reciben son Ambiente y Cultura, el que más recibe es el Comex, usted ve donde están las prioridades. ¿A quién en su cabeza le cabe que el Frente Amplio va a denunciar los tratados de libre comercio? ¿Qué, nos vamos a comprar nosotros mismo lo que producimos? Aquí es absurdo pensar en un Frente Amplio que llegue al Poder y realice este tipo de acciones.
¿Qué giro van a tomar para llamar la atención del electorado?
-Creo que tenemos que vernos más como una opción real de Gobierno.