miércoles, 4 de octubre de 2017

Los privilegios de parte de la ministra de Justicia, Cecilia Sánchez, para los privados de libertad siguen, pues recientemente giró la orden de instalar un teléfono inalámbrico en Máxima Seguridad de La Reforma para escuchar las quejas. La idea es mantener constante comunicación con ellos, pese a que eso requiera sacarlos de la celda y activar el protocolo de seguridad, inclusive en algunos casos la jerarca exige que se lo lleven rápido, acelerando la actuación de los custodios. Fuentes confidenciales mencionaron a DIARIO EXTRA que pareciera que Sánchez le hace caso a todo lo que los reclusos le dicen, ya que suele “jalar las orejas” a algunos funcionarios quienes no se dejan manipular ante las solicitudes que hacen los reos. La orden está dada y los policías penitenciarios saben que si la Ministra llama y solicita hablar con algún recluso o viceversa tiene que ser rápido, de lo contrario no descartan que sean regañados por Sánchez o acusados por los privados.



Los privilegios de parte de la ministra de Justicia, Cecilia Sánchez, para los privados de libertad siguen, pues recientemente giró la orden de instalar un teléfono inalámbrico en Máxima Seguridad de La Reforma para escuchar las quejas. La idea es mantener constante comunicación con ellos, pese a que eso requiera sacarlos de la celda y activar el protocolo de seguridad, inclusive en algunos casos la jerarca exige que se lo lleven rápido, acelerando la actuación de los custodios.
Fuentes confidenciales mencionaron a DIARIO EXTRA que pareciera que Sánchez le hace caso a todo lo que los reclusos le dicen, ya que suele “jalar las orejas” a algunos funcionarios quienes no se dejan manipular ante las solicitudes que hacen los reos.
La orden está dada y los policías penitenciarios saben que si la Ministra llama y solicita hablar con algún recluso o viceversa tiene que ser rápido, de lo contrario no descartan que sean regañados por Sánchez o acusados por los privados.

QUIEBRAN TELES

La garganta profunda agregó que la jerarca consintió a los reos con televisores de pantalla plana de 32 pulgadas, pese a que al parecer permitían tamaños más pequeños e inclusive algunos tenían de perilla.
Pero como unos estrenaban y otros no, estos últimos supuestamente decidieron dañarlos para que les dieron uno nuevo, situación que así fue y ahora todos en Máxima Seguridad cuentan con televisor de última generación.
Dicha acción ha causado un malestar generalizado entre los funcionarios, quienes aseguraron estar desmotivados porque la Ministra les resta autoridad y la población se ha empoderado, inclusive al punto de emitir amenazas como que van a llamar a “Mi Mamá”, como le dicen a Cecilia Sánchez.
Trascendió que hará algunos movimientos de jefaturas donde no se descarta que el nuevo jefe de Máxima Seguridad sea un sicólogo, tal como al parecer la jerarca desea. Sin embargo, eso no sería viable ya que a estos profesionales les pagan por la especialidad, será hasta la próxima semana que se sepa quién asumirá el ámbito donde los reclusos ven tele en pantalla plana.

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