Rafael Ángel Guillén Elizondo - Me siento preocupado por la descomposición social que experimenta nuestra sociedad, desde quien, irresponsablemente, graba las partes íntimas de una transeúnte.

Me siento preocupado por la descomposición social que experimenta nuestra sociedad, desde quien, irresponsablemente, graba las partes íntimas de una transeúnte. Extraño intento de asesinato a quien denuncia aquellas bajezas. Quien acusa falsamente a su semejante. El testigo que sin pudor, declara falsamente ante un tribunal para lograr se condene a un inocente. Cuando algunas de nuestras autoridades, demostrando su incapacidad funcional, hace desplante de matonismos y espectacularmente rompe las puertas de una casa, llevando de previo la televisión para que difundan su torpeza, luego sabemos que los resultados son negativos. Juicios interminables. Sicarios por la libre consiguiendo fácilmente el armamento requerido, para cometer sus sangrientos ataques en todo el territorio nacional. Una sociedad tolerante o poco crítica ante tantos desaciertos. Falta de fuentes de empleo. Un funcionario que pretendió regalar una calle pública a particulares, Vetos improcedentes, intenciones de gobernar por decreto, en un tema de vida y tantos hechos más que podríamos anotar. Sin embargo, nuestra actitud beligerante, no se asoma por ningún lado, no pedimos la corrección de tantos males y seguimos pensando que el cambio de mando en las instituciones públicas, sería una esperanza o consuelo, para mejorar nuestra situación. Reflexionemos.