SAN SALVADOR, (AFP) - La izquierda salvadoreña proclamó en la noche de este domingo el triunfo de Mauricio Funes en la elección presidencial de El Salvador, poniendo fin a 20 años de hegemonía de la derecha en una jornada electoral "pacífica y masiva".
Funes, candidato del Frente Farabundo Martí para la Liberación Nacional (FMLN), la ex guerrilla que combatió en la guerra civil salvadoreña (1980-1992) lideraba el escrutinio con el 51,2% de los votos, cuando se llevaban escrutadas el 90,1% de las actas de votación, según datos del Tribunal Superior de Elecciones (TSE).
Su rival, Rodrigo Avila, de la gobernante Alianza Republicana Nacionalista (ARENA, derecha), obtenía el 48,7%, 61.889 votos menos que el candidato de la izquierda.
Mientras el TSE proseguía su labor y a pesar de la escasa diferencia de votos que separa a los dos candidatos, el coordinador del FMLN, Medardo González, proclamó la victoria de Mauricio Funes, en estas históricas elecciones que están a punto de poner fin a 20 años de hegemonía indiscutible de la derecha salvadoreña.
"Habiendo llevado adelante el escrutinio de más de un 60% de actas, ya una tendencia irreversible, el FMLN es el nuevo partido en el gobierno y el cambio es representado por nuestro compañero presidente de la República hoy Mauricio Funes", anunció González poco después de que el TSE diera a conocer los primeros resultados oficiales parciales del escrutinio.
Desde que los medios de comunicación empezaron a dar la tendencia de la votación tras escrutar las primeras Juntas Receptoras de Votos, militantes del FMLN salieron a las calles, lanzando fuegos artificales, haciendo sonar las bocinas de los vehículos y ondeando la bandera roja del partido.
La directiva del FMLN convocó a sus militantes en la plaza Alberto Masferrer, en el sector oeste de San Salvador, para celebrar lo que a medida que pasaba la noche parecía una victoria irreversible de la izquierda salvadoreña.
El presidente del TSE calificó la jornada electoral de "pacífica y masiva", aunque los primeros datos oficiosos hablan de una participación del 60% de los 4,3 millones de electores convocados a las urnas.
"Hemos tenido un proceso electoral transparente, un proceso electoral tranquilo, pacífico y masivo", aseguró Araújo, en una cadena nacional de radio y televisión.
Durante la jornada se registraron algunos incidentes aislados, sobre todo con ciudadanos que se presentaron a votar con documentos falsos, por lo que tuvieron que intervenir la Fiscalía y la Policía.
La misión de observación de la OEA destacó la puntualidad con la que se abrieron las Juntas Receptoras de Votos (JRV), tres minutos antes de la hora prevista, así como que el 99% contó con "los materiales indispensables para votar" y estaban integradas por todos los miembros titulares.
El candidato de la derecha, Avila, ex director de la Policía Civil, quizá vaticinando el resultado que estaban arrojando las urnas, había declarado durante el día que "uno tenía que prepararse para cualquier resultado, de manera madura y responsable".
En total se instalaron 9.543 Juntas Receptoras de Votos (JRV) en todo el país, entre ellas, las del estadio Jorge 'Mágico' González de la capital, donde los más de 39.000 salvadoreños residentes en el extranjero habilitados para votar, pudieron hacerlo.
Era el caso de Jorge Alberto Tejada, de 39 años, quien llegó desde la ciudad estadounidense de Arlington, Virginia, para quien votar es "un derecho de elegir a nuestras autoridades y velar por que ayuden a mejorar el país para que nuestros hermanos salvadoreños no busquen lejos su bienestar".
Más de 4.000 observadores nacionales e internacionales velaron por la transparencia del proceso, mientas que 20.000 agentes de la policía y el ejército garantizaron la seguridad.
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