¿ADÓNDE VA EL AMERO?

• El amero: iniciativa para fusionar en una moneda, el dólar americano, el dólar canadiense y el peso mexicano.

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Juan José Arce Vargas pplana@colper.or.cr Semanario Primera Plana La elección de Barack Obama, como primer presidente negro de los Estados Unidos de América, surge dentro de una coyuntura de crisis financiera y económica en su país. Analistas de todo el mundo especulan acerca de cuáles serán sus propuestas en materia de política monetaria, en aras de fortalecer el dólar, o quizás fusionarlo. Anteriormente, la Administración Bush especuló con la idea de una unión monetaria norteamericana, con base en las ideas del economista canadiense Herbert G. Grubel, de establecer una moneda única para América del Norte: El Amero. Esa iniciativa responde a la integración comercial entre Canadá, Estados Unidos y México, después de la entrada en vigor del Tratado de Libre Comercio de América del norte (TLCAN) que generó grandes volúmenes de comercio e inversión entre los tres países. En México, el TLCAN ha empobrecido el campo de ese país, favorecido las grandes cadenas transnacionales, los grandes comercios absorbieron los pequeños comercios de México y aumentaron la migración hacia las grandes ciudades y los Estados Unidos. La iniciativa de una moneda unificada es vista como un fenómeno potenciador del TLCAN. Por su parte, en Canadá el proyecto de una moneda única, representaría un ahorro de hasta $3 billones en transacciones monetarias y aumentaría el PIB en un 33%, pero compartiría la deuda de los americanos que asciende a los 11 millones de millones de dólares, registrada a mediados de octubre de 2008. La deuda es un factor que afecta los precios de la moneda, y ésta sigue aumentando en Estados Unidos, mientras en Canadá las políticas gubernamentales han reducido la deuda, esfuerzos que no serían reflejados si las monedas se fusionarán. El poder de la economía de Estados Unidos y su hegemonía política, han hecho que los gobiernos canadiense y mexicano coloquen obstáculos a la creación del Amero, ante la posible pérdida de soberanía. Cualquier moneda unificada es el fruto de la situación económica de cada país y de un interés de los dirigentes para lograr ventajas para potenciar las economías nacionales. Sin duda, Barack Obama tendrá mucho que analizar en relación al Amero.