Gori. Georgia. AFP. EFE.-Georgia se declaró ayer sábado en “estado de guerra” en su pulso bélico con las fuerzas rusas por su región separatista de Osetia del Sur, que parece extenderse a otro territorio independentista, Abjasia, mientras la diplomacia internacional se movilizaba. En plena escalada entre Georgia y Rusia, Moscú envía parte de su flota del mar Negro a la región rebelde georgiana de Abjasia, dijo por la noche un funcionario del departamento de Estado estadounidense.
Horas antes, el presidente georgiano, Mijail Saakashvili, llamó a su par ruso, Dimitri Medvedev, a un “cese el fuego inmediato” y a “entablar negociaciones sin demora” sobre el conflicto que los opone en Osetia del Sur. En declaraciones a CNN, Saakashvili dijo también que su país está listo para un cese el fuego si Rusia detiene sus ataques.
Durante la jornada, Saakashvili afirmó que las fuerzas georgianas habían repelido varios ataques de las fuerzas abjasias en las gargantas de Kodori, único sector de Abjasia controlado por Tiflis.
Saakashvili dijo haber “firmado un decreto sobre el estado de guerra”, por el conflicto con Rusia. El término equivale a la instauración de la ley marcial, que el parlamento georgiano aprobó para un periodo de 15 días.
Para reforzar los esfuerzos bélicos, los 2.000 militares georgianos desplegados en Irak abandonarán el país en los próximos días.
Según el presidente ruso, la operación militar de las fuerzas rusas tiene por objetivo “obligar a la parte georgiana a la paz”. Su primer ministro, Vladimir Putin, visitó Vladikavkaz, capital de la república rusa de Osetia del Norte, fronteriza con Osetia del Sur.
Putin, que calificó de “legítima” la acción de Rusia en Osetia del Sur, dijo que Georgia “difícilmente” recuperará su soberanía sobre ese territorio. La canciller georgiana, Eka Tkeshelashvili, afirmó que su país afronta una “invasión rusa” y “necesita ayuda urgente”, mientras que en declaraciones a la BBC, Saakashvili acusó a Rusia de lanzar una invasión para “aniquilar” a su país.
Desde la ofensiva georgiana lanzada el jueves por la noche, la situación permanece confusa en la capital de Osetia del Sur, Tsjinvali.
El ejército ruso anunció haber “liberado completamente” Tsjinvali, pero Tiflis seguía defendiendo que mantenía el control sobre ella.
Al mismo tiempo, la aviación rusa bombardeó Gori, en el norte de Georgia, matando a un número indeterminado de civiles y destruyendo varios inmuebles, según la televisión georgiana.
Rusia “devastó” igualmente el puerto de Poti sobre el mar Negro, una infraestructura “clave para el transporte de recursos energéticos”, según Tiflis. El ejército ruso reconoció la pérdida de dos aviones de combate. Según un portavoz georgiano, Tiflis ha abatido diez aparatos rusos y destruido 30 tanques.
El balance de víctimas en el conflicto es objeto de controversia. Mil seiscientas personas habrían muerto en Tsjinvali desde el inicio de la ofensiva georgiana, según una responsable de Osetia del Sur, Irina Gagloieva. El embajador ruso en Tiflis habló de “al menos 2.000 civiles muertos” en Tsjinvali, según Interfax.
Tiflis desmintió tal cifra, y dijo que de lado georgiano ha habido 150 muertos, 40 de ellos civiles. Medvedev acusó a su vez a Georgia de haber provocado “miles de víctimas”, durante una entrevista telefónica con el presidente de Estados Unidos, George W. Bush, quien reclamó el cese “inmediato” de los combates.
Un ejército aguerrido
La guerra en la provincia de Osetia puede parecer a primera vista un combate desigual entre el gigante ruso y la pequeña Georgia, pero en el campo de batalla las cosas son diferentes. El presidente de Georgia, Mijail Saakashvili ha conseguido formar un poderoso pequeño Ejército con la ayuda de EEUU. Puede que Rusia lo destruya, pero no será ni rápido ni fácil, dicen los observadores en la región. Las tropas especiales de EEUU se dedicaron durante la última media década a entrenar unidades selectas de Georgia. Hoy en día, aproximadamente un cuarto de las fuerzas funcionales del país recibe entrenamiento de Estados Unidos. La columna vertebral del Ejército georgiano está compuesta por siete batallones de infantería formados de la nada y llevados de la mano por los boinas verdes estadounidenses del campamento de entrenamiento de reclutas a algo bastante cercano a la preparación de combate propia del estándar de la OTAN, una masa de cerca de 5.000 hombres.
REACCIONES:Francia propone un alto el fuego
-Nicolas Sarkozy, residente francés
El presidente de Francia y de turno de la Unión Europea (UE), Nicolas Sarkozy, ha propuesto un plan de alto el fuego y regreso al “statu quo” anterior al conflicto de Osetia del Sur, tras hablar con los dirigentes de Georgia, Reino Unido, España, Ucrania e Italia y con el primer ministro ruso, Vladimir Putin. La Presidencia francesa propone el “cese inmediato de las hostilidades”, “el pleno respeto de la soberanía y de la integridad territorial de Georgia” y el “restablecimiento de la situación que prevalecía anteriormente sobre el terreno, que implica la retirada de las fuerzas rusas y georgianas a las posiciones anteriores, con fórmulas de acompañamiento internacional”.
Londres apela a las negociaciones
-David Miliband, Canciller británico
El ministro británico de Exteriores, David Miliband, instó ayer a los gobiernos de Rusia y Georgia a detener los combates y empezar negociaciones de paz “lo antes posible”. En un comunicado, Miliband, que está en conversaciones con sus colegas en Europa y Estados Unidos, anunció que enviará a Georgia al representante británico para el Cáucaso Sur, Brian Fall, como parte de la misión de la Unión Europea y la Organización para la Seguridad y Cooperación en Europa (OSCE).
El ministro dijo que el Gobierno británico está “profundamente preocupado” por la violencia en Georgia y señaló que la escalada de los combates es “peligrosamente desestabilizadora” y hay riesgo de bajas civiles a gran escala.
EEUU arrecia discurso con Moscú
Washington. Estados Unidos. EFE.-Estados Unidos consideró ayer “desproporcionada” la respuesta de Rusia contra Georgia, en la provincia separatista pro rusa de Osetia del sur, y pidió un alto el fuego “inmediato” entre las partes.
Rusia ha lanzado una ofensiva contra Georgia, que incluye bombardeos estratégicos y ataques con misiles balísticos, dijo una fuente oficial, que pidió no ser identificada. Además, indicó que se han identificado ataques en zonas de Georgia lejos de la provincia separatista de Osetia del Sur, foco del conflicto, y donde se ha concentrado la lucha.
“(Rusia) ha utilizado los bombarderos más potentes del arsenal aéreo ruso y ha lanzado ataques con misiles balísticos en territorio georgiano”, dijo el funcionario. Según dijo, EEUU está haciendo todo lo posible para tratar de mediar en un acuerdo y conseguir el alto el fuego.
“Estamos pidiendo un alto el fuego inmediato y la retirada de todas las tropas”, aseguró. El funcionario señaló que los georgianos están siendo duramente atacados por lo que se están acelerando todas las gestiones diplomáticas para tratar de conseguir ese alto al fuego cuanto antes.
“Si la parte rusa quiere seguir presionando con el ataque militar, no hay mucho que puedan hacer los georgianos. Están siendo atacados duramente, por lo que tenemos que confiar en la diplomacia”, dijo.
El portavoz agregó que Georgia es un aliado cercano de Estados Unidos y manifestó que cuenta con el apoyo militar estadounidense.
Preguntado por si Washington ofrecerá ayuda militar en esta crisis, señaló que por ahora se está trabajando solo en la parte diplomática. “No estamos hablando de algo más allá de la diplomacia por el momento”, dijo.
Entre los motivos que pueden haber llevado a Rusia a actuar contundentemente contra Georgia, recordó que EEUU ha impulsado el ingreso de Georgia en la OTAN, a pesar del recelo de algunos países miembros de la Unión Europea y de la oposición frontal de Rusia.
“Se ha especulado sobre si el motivo por el que Rusia ha utilizado este desproporcionado uso de la fuerza contra Georgia es precisamente porque no quiere verla avanzar hacia la OTAN”, señaló.
Georgianos huyen del drama bélico
Gori. Georgia. AFP.-Los habitantes aterrorizados escapan de la ciudad georgiana de Gori en autobús y en coche después de unos bombardeos rusos que dejaron edificios ardiendo y, según testigos, varias víctimas mortales.
Señalando con el dedo un edificio destruido por un ataque aéreo, Volodia parece temer nuevos bombardeos en esta ciudad del norte de Georgia, la mayor de las situadas cerca de la región separatista pro rusa de Osetia del Sur, donde las fuerzas rusas y georgianas se enfrentaban.
“Lo que ha ocurrido aquí hace dos horas podría volver a suceder en cualquier momento”, confía Volodia.
Otro habitante, Sergo Batamanashvili, cuenta que su madre y su hermana han escapado ya de la ciudad, como centenares de habitantes sorprendidos por los ataques aéreos rusos. Pero él está decidido a permanecer en Gori y a engrosar las filas del ejército georgiano.
“No me iré. Éste es mi país. Me uniré al ejército mañana”, dice.
Varios autobuses y coches llenos de personas que huían de Gori, ciudad natal del ex dictador soviético Joseph Stalin, partieron en dirección de la capital georgiana, Tiflis. Por el momento no ha podido obtenerse ningún balance oficial del número de víctimas, pero los habitantes contaron a la AFP que ha habido varios muertos.
La televisión georgiana difundió imágenes de cadáveres en las calles y de edificios residenciales en llamas.
Una periodista de la AFP, que visitó la zona poco después de los ataques, vio varios edificios de viviendas en ruinas, algunos de ellos en llamas, y habitantes aterrorizados que se disponían a abandonar la zona.
También podían verse ambulancias entrando y saliendo de Gori.
Fuera del principal hospital de Gori, decenas de familiares angustiadas aguardaban las noticias sobre las víctimas de los ataques aéreos.