El Centro de Investigación y Estudios Políticos (CIEP), la Escuela de Ciencias Políticas, el Semanario Universidad y las Radioemisoras de la Universidad de Costa Rica (UCR), dieron a conocer la noche de este martes la última encuesta de opinión pública y comportamiento político. En esta ocasión se contó con el apoyo del Programa Estado Nación.
El estudio de opinión explica que en el plano mundial y nacional, se enfrenta una crisis sanitaria histórica que afecta todas las facetas de la vida en sociedad y que pone a prueba las capacidades de todos los sectores del país para afrontarla.
En ese marco, sostiene, la crisis de la pandemia del Coronavirus representa la principal preocupación de la ciudadanía costarricense, pues la considera el principal problema del país. En segundo y tercer lugar, se destacan como principales problemas el desempleo, así como el costo de la vida y la situación económica.
El CIEP recuerda que durante los últimos dos años, el desempleo y el costo de vida han sido las principales preocupaciones ciudadanas, tendencia que se mantiene al realizar una comparación interanual de los meses de marzo desde el 2013.
Crece confianza en labor del Gobierno frente a la pandemia
«La población percibe el Coronavirus como el principal problema que enfrenta el país actualmente. Ante esta crisis, las personas respaldan las decisiones que toma el gobierno para enfrentarlo. Más del 70% de la ciudadanía indica que confía en las decisiones que toma el gobierno, mientras que un 18.1 % tiene una posición neutral en la que no muestra confianza ni desconfianza. Un 7% lo conforman las personas que dicen no confiar del todo en las decisiones del gobierno en la actual coyuntura», precisa el estudio.
La actitud positiva del gobierno se refleja en las tres instituciones que han tenido un papel central en el establecimiento de medidas para la contención de la pandemia, que reciben un amplio respaldo a su trabajo.
La Caja Costarricense de Seguro Social, el Ministerio de Salud y el Ministerio de Seguridad tienen una evaluación positiva respecto a su labor y como resultado las opiniones negativas (mal y muy mal) no supera, en ninguno de los tres casos, los dos puntos porcentuales.
El Ministerio de Salud y la Caja Costarricense de Seguro Social (CCSS), tienen una alta aprobación ciudadana con un 95% de valoraciones positivas, en la que la diferencia entre ambas instituciones no es estadísticamente significativa. Para el caso del Ministerio de Seguridad es de 89%.
Además, Las medidas tomadas por el gobierno son bien percibidas por un alto porcentaje de
la población. Sin embargo, las medidas en materia sanitaria son mejor evaluadas que las económicas.
la población. Sin embargo, las medidas en materia sanitaria son mejor evaluadas que las económicas.
El 93 % afirma que las medidas en materia sanitaria están muy bien o bien, mientras que solo el 3 % lo percibe de manera negativa. Por su parte, respecto a las medidas en materia económica el 70 % opina que están bien, mientras que un 19 % las considera como malas o muy malas.
Por su parte, un 20% de las personas encuestadas reporta que el ingreso que su familia recibe mensualmente nos les alcanza para vivir y que tienen grandes dificultades; mientras que a un 37% señala que no les alcanza para vivir y poseen algunas dificultades. Un 32% afirma que sus ingresos les alcanza justo para vivir (sin afrontar grandes dificultades). Solamente un 11% de la muestra encuestada dice que les alcanza bien y que pueden ahorrar.
Opiniones positivas se incrementan
La opinión mundial en general sobre las presidentas y los presidentes se ha visto afectada por las acciones de los gobiernos como respuesta a la pandemia del coronavirus, reseña el CIEP para ahondar que en América Latina, la opinión pública referente al trabajo de los presidentes Vizcarra en Perú, Piñera en Chile, Duque en Colombia y Fernández en
Argentina, entre otros, ha experimentado cambios positivos.
Argentina, entre otros, ha experimentado cambios positivos.
En Europa, también se ha observado un incremento en el apoyo a Merkel en Alemania, Macron en Francia o Conte en Italia, así como un respaldo generalizado a sus gobiernos y las medidas tomadas.
«Si bien es cierto no es posible establecer la causalidad, se puede observar una correlación entre las medidas tomadas por los gobiernos, el apoyo a estas y las opiniones favorables hacia las personas gobernantes. Caso contrario, en América Latina se muestra un descenso en las valoraciones positivas para Bolsonaro en Brasil y López en México, en donde las acciones implementadas desde el Ejecutivo han sido poco débiles, a diferencia del resto de países del área», sostiene.
En el caso de Costa Rica se presenta el mismo comportamiento en cuanto a la valoración de la gestión del presidente Alvarado, junto al alto apoyo a las medidas tomadas desde el Poder Ejecutivo y el respaldo por las acciones en materia sanitaria y económica.
Las opiniones positivas sobre el trabajo del presidente Alvarado muestran un incremento de 43 puntos porcentuales respecto al mes de noviembre de 2019, la más alta en su gobierno, y uno de los mayores respaldos a la gestión de un presidente desde el año 1995, encontraron que, en el caso de Costa Rica, el incremento en el gasto social durante una administración puede tener efectos en la aprobación del Presidente, y como se ha visto en esta crisis, la aplicación de medidas como el Plan Proteger significa un incremento sustancial en el gasto social del gobierno, que podría contribuir a explicar este aumento de la aprobación presidencial en la actual coyuntura.
El CIEP explica que la aprobación de los mandatarios es sensible a las crisis, y a las respuestas dadas a estas. La evolución histórica de la percepción de la opinión pública sobre el trabajo de la persona que ejerza la presidencia del Poder Ejecutivo muestra que es fluctuante y los cambios pueden estar relacionados con las crisis y las formas en que son abordadas desde la presidencia.
Indica, al respecto, que los datos del Barómetro de las Américas para Costa Rica reflejan una
relación entre la evaluación del gobierno y las épocas de crisis. Para el año 1978, al inicio de la administración Carazo previo a la crisis de 1980, hubo una valoración positiva hacia su labor como presidente, que disminuyó precisamente al experimentar los efectos de la crisis económica. En este caso, las personas “culparon a los políticos de la crisis, como lo suponen las teorías económicas de la popularidad”.
relación entre la evaluación del gobierno y las épocas de crisis. Para el año 1978, al inicio de la administración Carazo previo a la crisis de 1980, hubo una valoración positiva hacia su labor como presidente, que disminuyó precisamente al experimentar los efectos de la crisis económica. En este caso, las personas “culparon a los políticos de la crisis, como lo suponen las teorías económicas de la popularidad”.
El historial muestra también picos de evaluación positiva en el año de 1983 (administración de Luis Alberto Monge, en la época de la recuperación de la crisis económica) y en el año 1987 (crisis políticas en Centroamérica y Premio Nobel del presidente Arias). Sin embargo, estos momentos de alta popularidad son coyunturales, y muestran un declive posterior.
Evaluación positiva
La evaluación sobre la gestión del gobierno en general también muestra un incremento
significativo, con una variación positiva de 57 puntos porcentuales (respecto a la
medición del mes de noviembre), un 76% de personas la consideran buena o muy
buena, frente a un 9% que afirma que es mala o muy mala.
significativo, con una variación positiva de 57 puntos porcentuales (respecto a la
medición del mes de noviembre), un 76% de personas la consideran buena o muy
buena, frente a un 9% que afirma que es mala o muy mala.
La respuesta institucional a la crisis del Coronavirus, y la confianza a las acciones tomadas por instituciones como la Caja Costarricense de Seguro Social, el Ministerio de Salud y el Ministerio de Seguridad podrían explicar este aumento en la valoración positiva en general del gobierno.
Por otro lado, las perspectivas económicas no mejoran significativamente ante la crisis, aunque no existe un crecimiento de la negatividad en las opiniones sobre la situación económica del país. Un 67% de las personas afirman que la situación económica del país es mala o muy mala, mientras que el 19% consideran que es buena o muy buena.