¿Por qué se tramita una demanda?
Por Pablo Cob Saborío
“En las Empresas del Grupo ICE actualmente se producen una serie de violaciones al ordenamiento jurídico y administrativo, que rige las relaciones con los trabajadores y trabajadoras que allí laboran. Hay ejemplos a diario sobre estas violaciones y atropellos.
En el caso personal, el 27 de junio de 2014, se produjeron acciones ilegales y violatorias a la relación de trabajo de muchísimos años, que yo mantenía con estas Empresas del Grupo ICE, todo lo anterior, sin mediar ninguna justificación para realizar estas acciones ilegales, razón por la cual me vi obligado a plantear la demanda correspondiente.
Lo que se busca con esta demanda, que fue anunciada desde que asistí a la Comisión de Ingreso y Gasto Público de la Asamblea Legislativa el día 28 de Abril de 2015, según consta en la página 14 de dicha sesión, fue parar estos actos violatorios e ilegales contra los trabajadores y trabajadoras de la CNFL y el ICE. Atropellos que han venido siendo dirigidos por el Presidente Ejecutivo del ICE y han ido en aumento día con día.
La indemnización económica que oportunamente fijarán los Tribunales de Justicia, no son para mi beneficio personal, desde que puse la demanda mi decisión fue destinarla a las Obras del Espíritu Santo, que lidera el Padre Sergio Valverde con gran acierto y responsabilidad social.
Esta eventual erogación tampoco tiene que provenir del Erario Público, tiene que ser asumida por los responsables de todas estas acciones ilegales y violatorias al ordenamiento jurídico y administrativo que rige este país, en el caso concreto del Grupo ICE cuando un Director comete una ilegalidad en sus actuaciones, debe responder con su patrimonio personal tal como lo indica el Artículo 43 de la Ley 8660.
Con lo anterior, quiero sentar las responsabilidades del caso a quienes no solo han realizado acciones ilegales y atropellos violatorios al ordenamiento jurídico y administrativo, sino también se han dedicado a denigrar y a afectar el prestigio y buen nombre de personas, funcionarios y funcionarias, que se atreven a mostrar un desacuerdo con esas acciones ilegales y violatorias.
Durante los más de 20 años que estuve al frente de la CNFL, fue una Empresa que respetó el ordenamiento jurídico y administrativo, tuvo mucho prestigio nacional e internacional, ganó dos veces el Premio Oro otorgado por la Comisión de Integración Energética Regional como mejor empresa latinoamericana, compitiendo con más de 250 empresas públicas y privadas del sector energético, se certificó en calidad de servicio, protección al ambiente y en seguridad ocupacional según las normas internacionales y lo más importante, fue una Empresa solvente, que siempre mostró resultados positivos y nunca números rojos en sus finanzas, como lo muestran los estados financieros auditados de todos esos años”
El exgerente de la Compañía Nacional de Fuerza y Luz (CNFL) Pablo Cob, tiene una demanda en contra de la entidad donde exige una indemnización de ¢540 millones por daños morales, además de la restitución en el puesto y el pago de los salarios caídos con intereses desde junio del 2014.
Así lo dio a conocer CRHoy.com en un reportaje publicado el viernes anterior.
Según el exjerarca, la demanda que se tramita en el Tribunal Contencioso Administrativo y Civil de Hacienda, la hizo con el fin de “parar una serie de violaciones al ordenamiento jurídico y administrativo” en la institución y asegura que el dinero de la indemnización que eventualmente establezcan los Tribunales de Justicia no se lo dejará él sino que lo entregará a las Obras del Espíritu Santo que administra el padre Sergio Valverde.
¿Por qué se tramita una demanda?
Por Pablo Cob Saborío
“En las Empresas del Grupo ICE actualmente se producen una serie de violaciones al ordenamiento jurídico y administrativo, que rige las relaciones con los trabajadores y trabajadoras que allí laboran. Hay ejemplos a diario sobre estas violaciones y atropellos.
En el caso personal, el 27 de junio de 2014, se produjeron acciones ilegales y violatorias a la relación de trabajo de muchísimos años, que yo mantenía con estas Empresas del Grupo ICE, todo lo anterior, sin mediar ninguna justificación para realizar estas acciones ilegales, razón por la cual me vi obligado a plantear la demanda correspondiente.
Lo que se busca con esta demanda, que fue anunciada desde que asistí a la Comisión de Ingreso y Gasto Público de la Asamblea Legislativa el día 28 de Abril de 2015, según consta en la página 14 de dicha sesión, fue parar estos actos violatorios e ilegales contra los trabajadores y trabajadoras de la CNFL y el ICE. Atropellos que han venido siendo dirigidos por el Presidente Ejecutivo del ICE y han ido en aumento día con día.
La indemnización económica que oportunamente fijarán los Tribunales de Justicia, no son para mi beneficio personal, desde que puse la demanda mi decisión fue destinarla a las Obras del Espíritu Santo, que lidera el Padre Sergio Valverde con gran acierto y responsabilidad social.
Esta eventual erogación tampoco tiene que provenir del Erario Público, tiene que ser asumida por los responsables de todas estas acciones ilegales y violatorias al ordenamiento jurídico y administrativo que rige este país, en el caso concreto del Grupo ICE cuando un Director comete una ilegalidad en sus actuaciones, debe responder con su patrimonio personal tal como lo indica el Artículo 43 de la Ley 8660.
Con lo anterior, quiero sentar las responsabilidades del caso a quienes no solo han realizado acciones ilegales y atropellos violatorios al ordenamiento jurídico y administrativo, sino también se han dedicado a denigrar y a afectar el prestigio y buen nombre de personas, funcionarios y funcionarias, que se atreven a mostrar un desacuerdo con esas acciones ilegales y violatorias.
Durante los más de 20 años que estuve al frente de la CNFL, fue una Empresa que respetó el ordenamiento jurídico y administrativo, tuvo mucho prestigio nacional e internacional, ganó dos veces el Premio Oro otorgado por la Comisión de Integración Energética Regional como mejor empresa latinoamericana, compitiendo con más de 250 empresas públicas y privadas del sector energético, se certificó en calidad de servicio, protección al ambiente y en seguridad ocupacional según las normas internacionales y lo más importante, fue una Empresa solvente, que siempre mostró resultados positivos y nunca números rojos en sus finanzas, como lo muestran los estados financieros auditados de todos esos años”