Por su doble condición de Ministro y obispo luterano. Sería discriminatorio para otras religiones, señala la Procuraduría
Dentro de pocos meses la mano derecha del Presidente, Melvin Jiménez, podría ser obligado a dejar su cargo como Ministro de la Presidencia.
Su doble condición de obispo luterano y Ministro es una violación a la Constitución Política, de acuerdo con Ana Lorena Brenes, procuradora general.
De mantenerse en el cargo, se estaría cometiendo una discriminación contra los sacerdotes católicos que no pueden ocupar un cargo en el Gobierno.
Asimismo, se estaría dando una pérdida de neutralidad del Estado en sus relaciones con otros grupos religiosos.
Uno de los requisitos que se establecen para ser ministro es no tener vínculos religiosos.
Sin embargo, al hacer el nombramiento de Jiménez, Solís estimó que los diputados constituyentes se referían únicamente a los sacerdotes católicos y no a líderes de otras religiones.
En estos momentos se estudia un reclamo de inconstitucionalidad contra el nombramiento de Jiménez y el informe de Brenes servirá a los magistrados de insumo para tomar una decisión.
La acción que tiene en la cuerda floja a Jiménez fue interpuesta por Álvaro Orozco, quien es director del grupo Movimiento Familia y Vida, que es de origen católico.
En su reclamo, Orozco pide a los magistrados que levanten la restricción para que los sacerdotes también puedan ser parte del Gobierno, pues de lo contrario sería discriminatorio.
Su doble condición de obispo luterano y Ministro es una violación a la Constitución Política, de acuerdo con Ana Lorena Brenes, procuradora general.
De mantenerse en el cargo, se estaría cometiendo una discriminación contra los sacerdotes católicos que no pueden ocupar un cargo en el Gobierno.
Asimismo, se estaría dando una pérdida de neutralidad del Estado en sus relaciones con otros grupos religiosos.
Uno de los requisitos que se establecen para ser ministro es no tener vínculos religiosos.
Sin embargo, al hacer el nombramiento de Jiménez, Solís estimó que los diputados constituyentes se referían únicamente a los sacerdotes católicos y no a líderes de otras religiones.
En estos momentos se estudia un reclamo de inconstitucionalidad contra el nombramiento de Jiménez y el informe de Brenes servirá a los magistrados de insumo para tomar una decisión.
La acción que tiene en la cuerda floja a Jiménez fue interpuesta por Álvaro Orozco, quien es director del grupo Movimiento Familia y Vida, que es de origen católico.
En su reclamo, Orozco pide a los magistrados que levanten la restricción para que los sacerdotes también puedan ser parte del Gobierno, pues de lo contrario sería discriminatorio.
Esteban Arrieta
No hay comentarios:
Publicar un comentario