Luis Paulino Vargas Solís
No soy meteorólogo ni mucho menos, pero por favor díganme si estoy equivocado: ¿estamos o no padeciendo una grave sequía? Vean que ya no soy ningún carajillo y que se cuentan por varias docenas los inviernos y veranos que he visto, y, la verdad, no creo haber visto un invierno tan seco como el último ni un verano tan prolongado como el actual.
No sé si el Meteorológico habrá sacado datos al respecto, pero creo que debería hacerlo. Y -como se lo leí a no me acuerdo quién- ya sería tiempo que el gobierno decrete emergencia nacional frente a este situación (puesto que, por su parte, decreta emergencias tan a la ligera para encubrir el estado de sitio a que fuimos sometidos por alrededor de 30 horas con motivo de la visita de Obama).
Y, por otra parte, ¿no es acaso esto otra manifestación del llamado "cambio climático" (que acertadamente se ha propuesto mejor llamar "colapso eco-social global")?
Va siendo hora de que el asunto se tome en serio, y se comprenda que no es algo que pueda resolverse con aspirinitas, como las que -de Al Gore a Laura Chinchilla- se nos vienen recetando. Que es, al fin y al cabo, una fórmula destinada a cambiar algo para no cambiar nada, mientras la catástrofe sigue imparable.
No soy meteorólogo ni mucho menos, pero por favor díganme si estoy equivocado: ¿estamos o no padeciendo una grave sequía? Vean que ya no soy ningún carajillo y que se cuentan por varias docenas los inviernos y veranos que he visto, y, la verdad, no creo haber visto un invierno tan seco como el último ni un verano tan prolongado como el actual.
No sé si el Meteorológico habrá sacado datos al respecto, pero creo que debería hacerlo. Y -como se lo leí a no me acuerdo quién- ya sería tiempo que el gobierno decrete emergencia nacional frente a este situación (puesto que, por su parte, decreta emergencias tan a la ligera para encubrir el estado de sitio a que fuimos sometidos por alrededor de 30 horas con motivo de la visita de Obama).
Y, por otra parte, ¿no es acaso esto otra manifestación del llamado "cambio climático" (que acertadamente se ha propuesto mejor llamar "colapso eco-social global")?
Va siendo hora de que el asunto se tome en serio, y se comprenda que no es algo que pueda resolverse con aspirinitas, como las que -de Al Gore a Laura Chinchilla- se nos vienen recetando. Que es, al fin y al cabo, una fórmula destinada a cambiar algo para no cambiar nada, mientras la catástrofe sigue imparable.
No hay comentarios:
Publicar un comentario