Despido de periodista en Colombia despierta polémica sobre relación entre publicidad y periodismo.
El despido de un periodista de una revista digital colombiana por la publicación de una columna de opinión sobre una petrolera canadiense y sus presiones publicitarias a los medios de comunicación del país -- como reportó Clases de Periodismo -- no solo generó polémica sino que fue el punto de partida para retomar la discusión sobre la relación entre publicidad y contenido periodístico.
El pasado 11 de octubre, Daniel Pardo escribió la columna titulada “Pacific es Colombia” en la revista Kien&Ke en la que hace referencia a la campaña publicitaria de la petrolera canadiense Pacific Rubiales Energy Corp que ha hecho “cambiar el tono” de las noticias que se publican sobre la empresa hacia lo que él denominó “publirreportajes pagados que se presentan como periodismo”.
En su columna, Pardo tocó el caso específico de la emisora La W y del director del programa Primera Página, Hector Mario Rodríguez, que fue enjuiciado por la petrolera tras denunciar una presunta inflación de cifras. Según Pardo, Rodríguez le aseguró que la petrolera cortó las denuncias con avisos publicitarios en su medio.
El 19 de octubre, Pardo recibió un correo electrónico de la entonces directora de la publicación, María Elvira Bonilla, donde le informaba de su despido según lo informó RCN Radio. Tras la polémica que esto causó, Kien&Ke publicó su versión donde aseguró que el despido se relaciona con las pruebas que le pidió a Pardo sobre la denuncia de Rodríguez, pero que no llegaron.
El periodista por su parte declaró al diario El Colombiano que esta fue “una excusa para echarme” debido a que pasaron ocho horas entre la petición de pruebas y el despido. Eventualmente las pruebas fueron publicados por otros medios. Esta situación culminó en la renuncia de la directora de la revista.
Para la Federación Colombiana de Periodistas, Fecolper, este hecho es importante porque brinda la oportunidad de reflexionar sobre la incidencia que tiene la pauta publicitaria en el contenido mediático. Sin embargo, señaló que este caso tuvo repercusiones en parte debido a la prominencia de los protagonistas. Daniel Pardo, por ejemplo, es hijo de un ex ministro que es actualmente el director de uno de los medios más importantes de Colombia.
Por tal motivo, consideró importante analizar este tipo de situaciones en las regiones donde las empresas ejercen mayor presión sobre los medios. Asimismo, Fecolper lamentó cómo la verdad “en ocasiones queda de lado por intereses económicos de los medios en los cuales se ejerce la profesión”.
En su columna, Pardo tocó el caso específico de la emisora La W y del director del programa Primera Página, Hector Mario Rodríguez, que fue enjuiciado por la petrolera tras denunciar una presunta inflación de cifras. Según Pardo, Rodríguez le aseguró que la petrolera cortó las denuncias con avisos publicitarios en su medio.
El 19 de octubre, Pardo recibió un correo electrónico de la entonces directora de la publicación, María Elvira Bonilla, donde le informaba de su despido según lo informó RCN Radio. Tras la polémica que esto causó, Kien&Ke publicó su versión donde aseguró que el despido se relaciona con las pruebas que le pidió a Pardo sobre la denuncia de Rodríguez, pero que no llegaron.
El periodista por su parte declaró al diario El Colombiano que esta fue “una excusa para echarme” debido a que pasaron ocho horas entre la petición de pruebas y el despido. Eventualmente las pruebas fueron publicados por otros medios. Esta situación culminó en la renuncia de la directora de la revista.
Para la Federación Colombiana de Periodistas, Fecolper, este hecho es importante porque brinda la oportunidad de reflexionar sobre la incidencia que tiene la pauta publicitaria en el contenido mediático. Sin embargo, señaló que este caso tuvo repercusiones en parte debido a la prominencia de los protagonistas. Daniel Pardo, por ejemplo, es hijo de un ex ministro que es actualmente el director de uno de los medios más importantes de Colombia.
Por tal motivo, consideró importante analizar este tipo de situaciones en las regiones donde las empresas ejercen mayor presión sobre los medios. Asimismo, Fecolper lamentó cómo la verdad “en ocasiones queda de lado por intereses económicos de los medios en los cuales se ejerce la profesión”.
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