ASAMBLEA LEGISLATIVA DE LA REPÚBLICA DE COSTA RICA
ACTA DE LA SESIÓN PLENARIA N.º 29 (Martes 15 de junio de 2010)
PRIMERA LEGISLATURA (Del 1º de mayo 2010 al 30 de abril 2011) PRIMER PERÍODO DE SESIONES ORDINARIAS (Del 1º de mayo al 31 de julio de 2010)
DEPARTAMENTO DE SERVICIOS PARLAMENTARIOS ÁREA DE ACTAS, SONIDO Y GRABACIÓN
DIPUTADO GUSTAVO ARIAS NAVARRO
Buenas tardes, señor Presidente, compañeras y compañeros diputados. Un saludo muy especial a los adultos mayores en su día, gente que ha hecho grande a Costa Rica y creo que hoy merecen el respeto de todos nosotros.
Es importante, en este día, hacer una reflexión que la he llamado “Enorme preocupación por las tarjetas de crédito”. Es preocupante, las estadísticas muestran que los hogares costarricenses enfrentan un peligroso nivel de endeudamiento. Datos de Costa Rica dicen que hay un poco más de 1.400.000 tarjetas de crédito, sin contar las de débito en manos de los costarricenses. Hay 408 tipos de tarjetas de crédito, según el MEIC. El periodo de morosidad es de 33%, y a diciembre del 2009, los cobros judiciales ascendían a un 13%.
Las tasas de interés en las tarjetas de crédito normales oscilan entre un 54% y 49%, lo que implica que, en año y medio, usted va a duplicar la deuda, situación que nos preocupa muchísimo. Y si vemos la realidad en lo que son las tasas en dólares, las hay de 34% y 42%. ¡Qué negocio más lucrativo! Sin embargo, me alegra que en todos los casos, en dólares y en colones, son los bancos del Estado los que menor tasa cobran, esto me llena de orgullo, es una banca que aún conserva los ideales de justicia e inclusión financiera para los más pobres.
A enero del 2010, la deuda que tienen los tarjetahabientes es de quinientos mil millones de colones.. El 33% de los poseedores de tarjetas están pagando los intereses y las comisiones, uno de cada tres costarricenses trabaja fuerte, para luego entregar gran parte de su salario en intereses y comisiones de usura. Es una epidemia, una peste de la cual no debemos contagiarnos y debemos curarnos con urgencia.
La crisis, me contaba un amigo dueño de un restaurante, que en las familias la están presentando ahora. Los ticos gambetearon la crisis con deuda y ahora es que están en problemas; es decir, el año pasado, lo que hicieron fue vivir casi con las tarjetas de crédito y ahora lo que está pasando es que su salario simplemente está pagando sus benditas tarjetas de crédito.
En el ámbito legal, se deja en total indefensión a esos centenares de familias y a la hora de enfrentarse con sus acreedores, ante atrasos y problemas financieros, la deuda seguirá creciendo a las altas tasas de interés que se pactan. Recuerde que usted después de haberse atrasado en el pago de las tarjetas, su expediente aparecerá manchado, su historial crediticio, el cual forma parte de su hoja de vida, aparecerá también con un pendiente.
Algunos dirán, los tarjetahabientes son los culpables por gastones, esto no es del todo cierto, es también culpa de los bancos que persiguen a la gente para entregarles las tarjetas, gastan millones en propaganda, pero no gastan nada en educación financiera para la gente que va a hacer el consumo.
Si quiebran las familias, el sistema financiero puede verse en problemas serios también. Recuerde que hay quinientos mil millones que están en pendientes. Pero, señoras y señores, nosotros vinimos aquí para legislar, para hacer justicia de manera pareja y esto está desbalanceado. Es urgente que pongamos las reglas para, entre los deudores y acreedores, se equilibren las cosas. Tenemos que ver varios proyectos que andan en algunas comisiones y verlos en serio, por el bien de las familias costarricenses y por la salud financiera de este país. Muchas gracias, señores y señoras diputadas.
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