Está manchado en la Sugef? Esta reforma limpiaría el récord crediticio de 63.000 personas
Medida tiene por objetivo permitir que más personas accedan a préstamos bancarios
Actualmente, en Costa Rica hay 78.000 personas con una mancha en su historial de pago, de las cuales unas 77.000 cayeron en esa categoría por deudas con tarjetas de crédito. Imagen de Shutterstock.
¿Se endeudó con una tarjeta de crédito y, aunque atiende bien el resto de sus cuentas, su historial crediticio quedó manchado, lo que le impide optar por un préstamo o aspirar a cualquier otra operación financiera?
Ese es el caso de miles de costarricenses para quienes mejoraría el panorama si la Superintendencia General de Entidades Financieras (Sugef) aprueba una propuesta de reforma en su sistema de medición del riesgo del crédito.
Actualmente, en Costa Rica hay 78.000 personas con una mancha en su historial de pago, de las cuales unas 77.000 cayeron en esa categoría por deudas con tarjetas de crédito, explicó Genaro Segura, director de Servicios Técnicos de la Sugef.
A pesar de que estos deudores han tenido problemas para pagar sus tarjetas, la mayoría atiende bien el resto de sus deudas, como hipotecas y compras de vehículo.
Sin embargo, por el hecho de arrastrar pagos irregulares en la tarjeta de crédito, caen en el peor nivel de calificación de riesgo en los bancos.
Es decir, ingresan al grupo de clientes de mayor cuidado para las entidades financieras, lo que supone que tendrán manchado su récord crediticio por cuatro años (48 meses). Durante ese tiempo, no pueden aspirar a un préstamo ni a ninguna otra transacción bancaria.
“A pesar de que la persona se ponga al día, mejore su capacidad de pago y atienda bien su deuda, luego de que fue manchada, su condición no mejora, sino que se queda en esa condición de manchado durante 48 meses”, explicó Segura.
En los bancos, los clientes son calificados por puntajes de acuerdo con su capacidad de pago. Cuanto mayor sea el puntaje, mayores son las posibilidades de acceder a un crédito. En contraposición, si el puntaje es bajo, las probabilidades son menores.
La propuesta de la Sugef es limpiar el expediente de unas 63.000 personas para quienes el puntaje mejoraría si se les elimina la mancha por no haber podido pagar una tarjeta.
De ese grupo, unos 38.000 pasarían al mejor nivel de riesgo crediticio si se les quita la mancha.
Otros 25.000 mejorarían su condición sin llegar al mejor nivel. Se trata de personas que atienden “más o menos” sus operaciones crediticias, pero que no lo hacen tan mal como para estar en la peor categoría.
En cambio, las restantes 15.000 personas definitivamente permanecerían en una mala categoría de pago, pues presentan moras hasta de 150 días.
Es decir, que la cifra de 78.000 usuarios con mancha crediticia bajaría a 15.000, explicó Segura.
“La medida que estamos valorando es que, en vez de que la mancha sea la que los mueva dentro del nivel de comportamiento de pago, que sean, más bien, sus propios atrasos los que determinen (la categoría del cliente en el banco). Esto permitiría que quienes sí atienden bien (sus pagos), puedan ver mejorada su situación”, añadió el funcionario.
Segura aclaró que se trata de una iniciativa que debe aprobar el Consejo Nacional de Supervisión del Sistema Financiero (Conassif) de la Sugef para enviarla a consulta de las entidades bancarias.
La idea es someter la propuesta a consulta con las entidades financieras este martes, adelantó el director de Servicios Técnicos de la Sugef.
De ser aprobada, la reforma no solo ayudaría a los deudores, sino también a la banca, que vería una merma en los costos de las estimaciones crediticias que debe hacer a los clientes de alto riesgo.
Cuándo se mancha el récord crediticio?
Esta situación puede ocurrir en cuatro circunstancias:
1. Cuando el banco pasa la operación a cobro judicial y le quita un bien al deudor para saldar la deuda.
2. Cuando el cliente, tras conciliar con la entidad financiera, entrega un activo voluntariamente.
Esta figura se llama dación de pago y se define como la transmisión de una cosa al acreedor en compensación de una deuda.
3. Cuando, por la falta de pago del deudor, el fiador es quien asume la deuda.
4. Cuando el banco pasa por “incobrable” una operación porque verifica que hay muy pocas probabilidades de que la deuda sea saldada.
En este último escalafón, están los deudores de tarjetas de crédito.
La reforma promovida por la Sugef para limpiar el historial de esas 63.000 personas es que se eliminen dos de esas cuatro causas de mancha crediticia: la dación de pago y el “paso por incobrable”.
“Lo que estamos planteando –porque es un tema que se va a enviar a consulta– es la posibilidad de quitar la mancha por esa razón de ‘pase por incobrable’. En su lugar, lo que aplicaría (para que los bancos calculen el nivel de riesgo del cliente) es el nivel de atraso que trae la persona”, argumentó Segura.
En cuanto a la figura de dación de pago, el experto aseveró que “tiene muy poco impacto”.
“En los últimos cuatro años solo se han reportado 153 casos manchados por dación de un bien en pago”, dijo.
Otro empujón: tres arreglos de pago en lugar de dos
Otra de las alternativas de Sugef para aliviar la presión de quienes tienen un ajustado historial crediticio es la posibilidad de optar por tres arreglos de pago en lugar de dos, como ocurre actualmente.
Hoy, cuando el cliente tiene una deuda a la que no puede hacer frente, el sistema financiero le permite optar por dos refinanciamientos en un período de dos años (24 meses).
Si en ese lapso, luego de haber utilizado la segunda oportunidad de readecuación de la deuda, la persona necesita una tercera prórroga, su gestión crediticia se convierte en una operación especial.
“Son operaciones que pasan a un régimen de monitoreo por un período de 90 días (tres meses) e implica que la categoría de riesgo se deteriora”, enfatizó Segura.
El cambio en este sentido, que ya fue aprobado por Sugef y publicado en La Gaceta, consiste en otorgar al cliente una tercera oportunidad de arreglo de pago.
“Hasta hoy, a la segunda (readecuación) la operación pasa a ser especial; ahora, con el cambio, sería a la tercera”, aclaró el especialista.
La reforma abre una ventana de 12 meses, a partir de su entrada en vigencia, para quienes están a punto de ingresar a la categoría de operación especial.
Es decir, si hoy, alguien con dificultades para pagar una deuda había pedido un arreglo de pago en los últimos dos años, tiene posibilidad de solicitar otro sin que su operación se convierta en “especial”.
¿A qué responden los cambios?
El director de Servicios Técnicos de la Sugef dijo que convergen varias razones para que la entidad decida reformar su sistema de medición del riesgo del crédito.
Una de ellas es la necesidad de determinar si hay entidades financieras con carteras de clientes deterioradas.
“La Superintendencia está mejorando su metodología de cálculo de estimaciones crediticias o de pérdidas de los bancos. Nos encontramos avanzando hacia nuevos estándares en materia de contabilidad. Y en algunos de ellos, estos mecanismos, como el puntaje, van a determinar muy claramente elementos como una cartera deteriorada”, argumentó.
Según dijo, el hecho de que tantas personas aparezcan con una mancha en su récord crediticio “ensucia un poco los datos”. Entonces, lo que quieren es saber quienes, efectivamente, son los peores deudores.
El funcionario aclaró que sacar a tantas personas del estatus de la mancha crediticia no supondría ningún obstáculo para los bancos, pues para medir el nivel del riesgo de los clientes ya cuentan con el sistema de puntaje.
“El puntaje va a seguir surtiendo un buen efecto. Antes de la mancha, el puntaje ya mostraba un problema, porque ya la persona, posiblemente, esté en un nivel de comportamiento de pago malo. Más bien, la mancha lo que ocasionaba era una cierta redundancia y tal vez un problema para poder identificar mejor los riesgos de otras operaciones que sí se atienden bien”, expresó Segura.
Otra de las razones a las que apela la Sugef para promover las modificaciones es la coyuntura económica.
“Es una oportunidad para generar más confianza. Que los bancos motiven la demanda y que las entidades financieras atiendan a más clientes”, dijo el experto.
La semana anterior, el presidente Carlos Alvarado dijo que había pedido a la Sugef y al Conassif trabajar en una propuesta para “aliviar” a las personas que tienen una mancha crediticia y que, por esa razón, no pueden optar por un préstamo para vivienda o para emprender.
También la semana anterior, el Banco Central de Costa Rica (BCCR) acordó reducir el encaje mínimo legal para las entidades financieras, con el objetivo de estimular el crédito en la economía del país.
El encaje representa un porcentaje de las captaciones (sean depósitos o captaciones) efectuadas por las entidades financieras supervisadas, que debe mantenerse como una reserva, en efectivo, en las bóvedas del Banco Central.
Esa reserva se redujo de un 15% a un 12% para bancos, empresas financieras y mutuales, lo que representa que estas entidades tendrán más liquidez para otorgar préstamos.