“He escuchado que existe”, respondía el subgerente del Banco de Costa Rica (BCR), Guillermo Quesada, al diputado Ottón Solís sobre la tenencia de un segundo audio.
Quesada es justamente quien denunció mediante un primer audio una supuesta propuesta del empresario del cemento chino, Juan Carlos Bolaños, para no pagar el préstamo de $30 millones al BCR.
Esta vez sería su abogado, José Pablo Badilla, quien tendría en su poder un segundo audio, que también involucraría a Bolaños. En el encuentro también habría estado el abogado Enrique Ramírez.
Así se desprende de una denuncia anónima que exige a la Fiscalía General investigar la existencia de la grabación y de ser así corroborar la veracidad de la información. Al cierre de edición, el Ministerio Público no tenía conocimiento.
DIARIO EXTRA buscó a Badilla para conocer si hubo una conversación con Bolaños y obtener una copia del audio, pero se limitó a responder que “no se iba a referir”.
Por su parte, Ramírez confirmó que la reunión existió, pero jamás acordó grabar un audio con Badilla.
“Sí estuvimos reunidos un día después de la reunión del hangar en un restaurante en el bulevar de Rohrmoser, pero yo en ningún momento acordé grabarlo, y en cuanto a lo que se conversó en ese momento y bajo las circunstancias en que estuve ahí, por confianza como abogado acercando a dos partes (Quesada-Bolaños), yo no debo ni puedo revelar la conversación, no estoy autorizado por ninguna de las partes”, manifestó a este medio.
EN UN LUGAR
DE ROHRMOSER
De acuerdo con la denuncia que pone como firmante a “todos los costarricenses”, fue en un restaurante peruano en Rohrmoser que se grabó este segundo audio.
Los presuntos presentes fueron Badilla, el abogado Ramírez, Bolaños y uno de sus representantes legales, Carlos Jacobo.
“De previo a asistir a este almuerzo, don Enrique y don José Pablo acordaron grabar a Juan Carlos Bolaños, esto a solicitud del segundo de ellos, pues siempre existía recelo con este señor, que además era denunciante de don Guillermo (Quesada) y según manifestaba en su última reunión, persona sumamente cercana a diputados, el Presidente (Luis Guillermo Solís) y magistrados”, indica el documento.
Agrega que si bien Quesada no asistió al almuerzo, siempre supo de esta reunión e incluso cada cierto tiempo era comunicado por Badilla para pedirle datos.
EL TÍTERE
En la reunión, cuenta la denuncia, Bolaños ya más cómodo y de alguna manera provocado por Badilla y Ramírez, señaló que él tenía acceso directo a Casa Presidencial.
“Pues tenía en su planilla a Morales Zapata (Víctor) y a Otto Guevara, diputados, que por medio de ellos incluso logró acercarse al señor Mariano Figueres, jefe de la DIS (Dirección de Inteligencia y Seguridad), y que si bien era cierto este señor era muy difícil de acceder, a solicitud también de Mario Barrenechea (gerente del BCR), que era su mejor amigo, logró ayudas de este funcionario”, expresa el documento dirigido a la Fiscalía General.
Según esta denuncia, Bolaños habría afirmado que el presidente Solís era un “títere” de unos pocos, esencialmente de Figueres y Morales Zapata. “El hombre firmaba y hacía lo que le indicaran”, señala el texto.
“CELSO ACTÚA
A MIS ÓRDENES”
El documento establece que Bolaños se mantuvo hablando por más de una hora y contó cómo el cemento ingresó a suelo nacional.
“Su red de corrupción en todos los poderes, cómo pagaba viajes a diputados y al magistrado Celso Gamboa, quedando todo grabado en el audio que tienen los señores Badilla Villanueva y Ramírez Acuña”, manifiesta la denuncia.
Unos $3 millones es la oferta que habría mantenido Bolaños para que Quesada aceptara su plan (de aprobar la violación del secreto bancario para no pagar al BCR).
Además, habría ofrecido a Badilla y Ramírez que se constituyeran en sus abogados para pelear en el Contencioso Administrativo contra el BCR.
“Sumó a lo ofrecido que si Guillermo aceptaba su responsabilidad y echaba la culpa a Raven, lograría con sus contactos el archivo de la causa penal, pues Celso actuaría a su primer orden”, asegura la denuncia.
POR LA PRENSA Y
UN PRIMER AUDIO
Indica el denunciante que si el primer audio no se hubiera filtrado y la prensa nacional no se hubiera involucrado, así como al oligarca Alberto Raven Odio, de ninguna forma se habría conocido la corrupción en la entrega de este crédito y las supuestas personalidades involucradas.
Agrega que se supone Bolaños sabe la existencia del presunto segundo audio, aún “más relevante y perjudicial” que el primero, debido a que aparentemente hay muchos teléfonos intervenidos “ilegalmente”.
Se menciona en el documento a un empresario de apellido Martínez, que sería exdueño de varios hoteles y restaurantes en San José.
“Don José Pablo y don Enrique decidieron no filtrar este audio, pues tenían fundado temor de represalias por parte de las más altas jerarquías del Poder Judicial y del mismo Gobierno, así como de la Asamblea Legislativa”, acota el documento.
EN CASA DE OTTÓN SOLÍS
La denuncia menciona que diputados y periodistas conocerían la existencia del segundo audio. Entre ellos se cita a DIARIO EXTRA y CRHoy.com.
Habla el documento de que se supone el congresista Ottón Solís citó en su casa a Quesada y su abogado Badilla.
Solís, según la acusación, habría increpado a ambos sobre el deber cívico de aportar este audio y su responsabilidad con la patria.
“En esta reunión estuvieron periodistas destacados y preocupados por la noticia del cementazo, que van a constituirse en las personas que se acercaron a este grupo de señores y saben de primera mano que se presionó a Badilla por parte de todos, pero este en forma esquiva mostró mil y un pretextos para no entregar el audio al señor Ottón Solís”, destaca el texto.
Supuestamente estas personas escucharon serias manifestaciones de Bolaños en relación con Gamboa, el fiscal general Jorge Chavarría y los diputados Guevara y Morales Zapata.
PREOCUPADOS POR
EL PODER JUDICIAL
Tanto Ramírez como Badilla afirmaron sentirse preocupados por supuestas situaciones que se habrían presentado en el Poder Judicial.
Supuestamente Bolaños manifestó a Quesada que pronto le aplicarían medidas cautelares muy graves, situación que era presuntamente manejada por Gamboa con “su gente”, y que si se analizaba el expediente se vería una celeridad inusual.
“Don Guillermo fue ubicado por un exfiscal de nombre Guillermo Hernández, quien se presentó como asesor externo del fiscal Chavarría, y le pidió que por deber cívico rindiera un testimonio confidencial al Fiscal General y manifestara todo lo que supiera en relación al crédito otorgado a Sinocem, pues en el gobierno corporativo de Rivera Turcios, en el cual Quesada fue subgerente general del BCR, se le había denegado una gestión de préstamos a esta empresa”, dice el documento.
Quesada habría entregado la información a la fiscal adjunta Berenice Smith y al parecer Bolaños se habría manifestado conocedor de dicha entrevista.
“Señalaron que el magistrado Celso Gamboa dijo que a eso no se le hiciera caso y que al contrario se le persiguiera y sacara del banco a don Guillermo a cualquier costa, pues esa era la solicitud de Barrenechea y Casa Presidencial”, concluye el documento.