Las fuertes lluvias y el panorama que proyecta el Instituto Meteorológico Nacional (IMN) para los cuatro cantones de la Zona Norte, llevaron a la Comisión Nacional de Prevención de Riesgos y Atención de Emergencias a declarar una ALERTA VERDE preventiva, con el propósito de alertar a los organismos de primera respuesta y a las poblaciones que viven muy cerca o dentro de las quebradas.
Esta región fue golpeada durante la noche de ayer y la madrugada de hoy por un sistema de baja presión que generó mucha agua en algunos ríos como Cuatro Bocas, Niño, La Muerte y Frío, los cuales se desbordaron y anegaron varias poblaciones a lo largo de su cauce.
En el cantón de Upala, el agua de las quebradas inundó unas 50 casas, cuyas familias se trasladaron a dos albergues: uno con 100 personas en Cartago Norte y otro con 125 personas en Cuatro Bocas.
En Guatuzo, desde la mañana se habían refugiado en la escuela de Moravia Verde unas 32 personas, las cuales están siendo atendidas por el personal del Comité Municipal de Emergencias de la zona.
Las lluvias también generaron daños en las provincias de San José y Heredia, donde se registraron anegamientos en algunos barrios de Santo Domingo y Desamparados, debido a la saturación de las alcantarillas.
La CNE envió personal y suministros a los cantones de la Zona Norte, para colaborar con las acciones de primera respuesta. Se enviaron diarios, espumas y cobijas.
Donación del Vaticano
Entre tanto, en las instalaciones de la CNE en San José, representantes de la Conferencia Episcopal hicieron durante la tarde, la entrega de una donación de unos 15 millones de colones ($30.000) a la CNE, que habían sido donados por el Vaticano, para colaborar con los afectados de la tormenta “Tomas”, ocurrida el año pasado.
Los recursos fueron depositados al Fondo Nacional de Emergencias. Los donantes sugirieron a la CNE utilizar los recursos en las necesidades de algunas comunidades de Aserrí.