A pocos metros de esta oficina, dentro de una caja fuerte, dos documentos reposan como si nada hubiera pasado después. Son las cotizaciones que las empresas Holcim y Cemex dieron al entonces empresario de construcción Juan Carlos Bolaños y, según su propio relato, lo motivaron a quebrar el duopolio del cemento en Costa Rica e importar material desde China desde principios de 2015. Nadie pensaba entonces que esas cotizaciones fueran a resultar un material tan picante.
Son las oficinas de Sinocem Costa Rica, la empresa que Bolaños preside y que se ha colocado ante el ojo público en semanas recientes debido a denuncias publicadas por medios de comunicación. Alrededor impera una nube inédita de acusaciones sospechas y de conflicto empresarial, además de filtraciones y seguimientos con repercusiones en recintos políticos de distintas banderas y en el Banco de Costa Rica (BCR), donde un sector de directivos teme una operación fraudulenta. Ahí está el problema por ahora.
A las 7 p.m. de este viernes, tres días antes de que la Asamblea Legislativa instalase una comisión para investigar los créditos que el BCR ha dado a Sinocem, Bolaños aceptó esta entrevista en su oficina.
Dos días antes los directivos bancarios habían acordado suspender al gerente Mario Barrenechea y tres semanas atrás había renunciado a la presidencia de la entidad la directora bancaria Paola Mora. Ambos son defensores de la participación del banco como palanca financiera del negocio de importación de cemento chino, con la justificación de abaratar los precios de ese vital insumo en el mercado nacional.
Para Bolaños -un empresario atípico, adulador e intrépido- todo se resume a una guerra sucia comercial por querer romper el duopolio del mercado de cemento que ostentan las empresas Cemex y Holcim.
Otros temen que, más bien, este sea el pretexto para activar una red de aliados políticos y para sacar del BCR créditos por $30 millones sin certeza de pago.
“Son mentiras”, insiste con su estilo locuaz este empresario que en privado se jacta de contactos poderosos y en público enfatiza el pretendido beneficio social de su negocio.
“¿De qué se trata todo? Diay, de un mercado de $400 millones al año que no quiere ser dividido ni regulado, que quiere seguir como estaba antes de 2015, cuando yo ingresé”.
Hasta ahí, uno dice que esto es un pleito de empresas, pleito de negocios por un mercado. ¿Pero, en dónde entra la parte política?
-Aquí es un asunto muy simple: tenemos los intereses plenos del bufete Zurcher Odio & Raven que trabajan y se presentan como abogados de Holcim, y tenés a un socio de dicho bufete en la junta directiva del BCR, al que –desgraciadamente- tengo que acudir para pedir recursos económicos. Si a eso le sumás otro directivo, Francisco Molina, que sorprendentemente tenemos ahí unas noticias de que tiene un interés o un ligamen directo con un periódico digital que está domiciliado en la Sabana. ¿Qué esperás? (el directivo denunció el giro irregular de más de ¢4 millones desde una cuenta del medio digital CRHoy. Vea entrevista aparte).
La junta directiva del Banco de Costa Rica se convirtió en el campo de batalla que debería ser realmente comercial.
Bolaños habla de CRHoy muchas veces en la entrevista, el medio que junto a Diario Extra ha publicado informaciones críticas o de supuestas irregularidades en el BCR a favor de Sinocem. Se suman también cuentas anónimas en redes sociales desde donde se divulgan denuncias o rumores a favor de Sinocem o en su contra. La guerra fría del cemento en Costa Rica, como tituló UNIVERSIDAD en setiembre de 2016, ahora es una guerrilla y está candente como los hornos donde se produce el clínker básico para hacer el cemento.
La chispa principal fue la publicación de un audio producto de una reunión de Bolaños con el exgerente del BCR Guillermo Quesada, en la cual se oye al empresario sugerir la posibilidad de buscar una forma de evitar pagar el préstamo bancario.
El audio proviene de una reunión en el hangar 5 del aeropuerto Tobías Bolaños. Ese audio llegó a junta directiva del BCR el 14 de junio y activó las sospechas de algunos directores, que ahora aprobaron salir a buscar a un grupo de expertos externos para que investiguen las circunstancias en que se dio ese crédito con el apoyo de Barrenechea y Paola Mora.
“¿Usted sabía que yo, hoy, hoy, no tengo copia del acta de la junta directiva, del 14 de junio anterior, que tanto citaron y que CRHoy sacó, y yo que soy el cliente, el Banco no me la ha dado? ¿Cómo me explica eso? Eso es para mi criterio personal, totalmente irregular”.
¿Usted tiene aliados ahí, Juan Carlos?
-Ninguno, yo no tengo aliados.
En la junta directiva del Banco hay gente que defiende el negocio que está llevando usted.
-Bonito tema. Ahorita le voy a entregar yo a usted, que el mismo reglamento de bancos les solicita a los miembros de junta para evitar el riesgo de los créditos, que deben conocer a sus clientes y deben estar totalmente entendidos de la operación de sus clientes. ¿Cómo me explica eso? ¿De qué se cuestionaba a doña Paola Mora si era una obligación suya? Los directivos que no conozcan a sus clientes, que no estén enterados de cómo le está yendo al cliente y que no se preocupen, son un resto de vagabundos.
La voz de ese audio sí es la suya.
-Sobre el audio, yo lo denuncié en vía penal.
¿Por qué?
-Lo voy a aclarar y a usted le voy a entregar la resolución, apenas la tenga en mi mano. No quisiera referirme al tema hasta que yo no tenga esa resolución.
¿Pero por qué denuncia el audio?
-Porque no es un audio correcto.
¿Quién lo llevó? ¿Quién filtró el audio?
-Alberto Raven (Directivo del BCR y abogado de Holcim). Y nada más te vuelvo a decir: es un audio incorrecto.
¿Pero por qué es incorrecto?
-¿A usted no le parece suspicaz que un directivo como él, Alberto Raven Odio, lleve un audio al Banco, y discuta un montón de cosas? Pregúnteme si yo recibí una sola llamada telefónica sobre todo eso. Pregúnteme si alguna persona del Banco responsablemente me preguntó a mí si yo era el de ese audio. No se tomó un debido proceso.
Usted lo está denunciando y puede decir por qué lo está denunciando. Porque ese no es usted, porque le intervinieron una conversación privada, porque lo trucaron… ¿Por qué lo está denunciando?
-El audio no es correcto. Es una prueba espuria. Si eso es lo que usted quiere, no voy a calificarlo.
Bolaños estudió Derecho pero no acabó de licenciarse y no puede ejercer. Este hombre de 38 años, y proveniente de una familia de clase media de Grecia, optó por las empresas. Empezó con maquinaria, luego construcción, luego a importar maquinaria china, después cemento chino, además de algunos negocios inmobiliarios y cría de caballos finos que a veces usa como moneda de pago, según su relato.
Su lista de contactos se parece mucho a la de un político de carrera y se entiende, porque dice conocer a muchos de ellos y más allá.
Ha visitado la Casa Presidencial al menos en seis oportunidades entre 2015 y 2016 para reuniones con el entonces ministro de Presidencia, Melvin Jiménez, con el director jurídico Marvin Carvajal y -en una ocasión- con el presidente Luis Guillermo Solís, quien en términos generales defiende la ruptura del duopolio del cemento provocada por un cambio en los reglamentos, que hizo su ministro de Economía Wélmer Ramos.
Normalmente esto debería ser un pleito entre empresas, una pelea por mercado, pero aquí aparecen personajes políticos defendiendo o atacándolo a usted o a las otras empresas grandes. ¿Por qué don Otto Guevara es un aliado suyo en esto? ¿Por qué él, don Víctor Morales, don Luis Vásquez…?
-¿A usted le parece lógico que a un empresario que quiere traer unos saquitos de cemento para un proyecto lo cuestionaron tanto por el dique de Nosara, que dijeron que el cemento se rompía, se resquebrajaba… Resulta ser que nada de eso pasó, que era falso. ¡Mentira! ¡Mentira! Todo una pinche mentira. Y para su sorpresa teníamos al Colegio de Ingenieros y de Arquitectos, a todas las cámaras en general, en contra de la importación de cemento.
¿Por eso los aliados?
-No tengo aliados. ¿Qué es lo que sucede? Que tenemos a unas personas interesadas en proteger el mercado del cemento, en proteger los intereses de algunos para encarecerles a los costarricenses el producto y así que no haya competencia ni venga un tercer loquito a alterar el precio del mercado. Se lo acabo de demostrar a usted en números claros. Simplemente, bajás de $200 la tonelada a $165, como está hoy en día, y te sobran $70 millones de mercado. ¿Con $70 millones qué no hace usted?
¿Qué no hace de qué?
-¿Qué no podría hacer usted con $70 millones? Pagar detectives para que tomen fotos, incentivar a medios de comunicación para que persigan empresarios, posiblemente incentivar a funcionarios públicos para que también cuestionen a los empresarios que vienen a romper oligopolios. Podrías hacer muchas cosas con ese recurso económico.
¿Es cierto que la garantía de su crédito con el BCR es el mismo cemento que usted importa y que ese material tiene un plazo de caducidad? ¿Sí o no?
-Es la cuarta o quinta garantía consecuente.
¿Cuál es la primera?
-No puedo conversar de eso porque es un tema de privilegio bancario y secreto bancario.
¿Por qué usted acabó teniendo la defensa de algunos políticos de diversos colores?
-Para que estemos claros, el negocio no se politizó. Eso es totalmente incorrecto. Lo complicado aquí es que a los gobiernos anteriores -si usted lo estudia- no les interesaba abrir un mercado caro que tenía un producto esencial, que era un producto caro.
¿Cómo hace uno para que el negocio propio tenga defensores en el campo político?
-No tengo defensores en el campo político.
Bolaños por momentos sube el volumen, golpea el escrito o se levanta y se acerca a la cara del entrevistador. Cita documentos e informes que promete entregar luego. Tiene muy asumido el discurso de bien público para defender su negocio y trata de sacudirse de relación alguna con personajes de la política.
Decíamos que en privado se ufana de su lista de amigos, pero en público evita poner en boca propia lo que ha sido evidente. El libertario Guevara ha sido un aliado clave con su discurso antimonopolio y algunas gestiones directas por el caso del cemento chino.
Morales Zapata también ha sido un gestor. Ambos fueron mencionados en una denuncia anónima que fue desestimada por el Ministerio Público. Una de varias. La última señalaba que los desembolsos del crédito del BCR se depositaban en una empresa ‘de papel’ en Hong Kong creada para ese propósito el 20 de octubre de 2015, dos semanas después de aprobado el crédito por $20 millones en el BCR.
Eso también la publicó el medio CRHoy, que después entrevistó al fiscal general, Jorge Chavarría, quien negó la existencia de indicio de delito en este caso y resumió todo el caso a una pelea comercial por el mercado del cemento.
“Le insisto: yo no tengo defensores míos en el campo político. Tengo simplemente un producto, un negocio, y una iniciativa de bienestar común, de bienestar social. Todo el mundo quiere tener el cemento barato, todo el mundo quiere el cemento económico, todo el mundo quiere tener un buen producto con un buen precio. Tan simple como eso. Si ves los índices del INEC, el cemento había tenido un incremento directo en los años anteriores, nunca una disminución de precio. (Este Semanario consultó a esa institución y en efecto la entrada del cemento chino, en 2015, coincide con un cambio en la tendencia de la variación de precios del material en cantidades de mayorista para obras públicas. De febrero 2012 a diciembre subió un 22%, pero de enero 2015 a junio de 2017 solo se incrementó un 0,06%).
Me dice usted que en el interés de don Otto Guevara es solo el bienestar público…
-Don Otto es un libertario, a él no le gustan los monopolios de Estado y mucho menos un oligopolio privado. Es lógico que no le va a gustar. Es lógico que eso va en detrimento de la sociedad. ¿Cuánto cree usted que -en millones de dólares- se ha ahorrado el Estado costarricense por la rebaja reflejada en los índices del INEC? Pudimos abrir un mercado que motivó en un 2 o 3% el precio directo final del producto teniendo en nuestras manos solo el 4% del mercado.
Otto Guevara ha estado cerca suyo incluso antes de ser diputado.
-Otto es una excelente persona, lo estimo mucho. Es mi amigo. Es una buena persona, es una persona que respeto y es honrado.
Visitaba este edificio con alguna frecuencia desde antes de su primer barco de cemento.
-Hemos salido y hemos compartido. Es mi amigo, pero enfoquemos así. Disculpame, pero Costa Rica es una finca muy pequeña. Yo conozco muchas personas y nosotros aquí nos conocemos todos en general.
¿Habría sido posible su negocio si el resultado electoral de febrero del 2014 hubiera sido otro, si no estuviera el PAC y sí el PLN?
-Antonio Álvarez Desanti dice que por sorpresa se cambió el reglamento, sin tan siquiera tomarse la molestia de leer y hablar con fundamento, y se pone a comparar los bananos de él (de las fincas bananeras de su propiedad) con el cemento, deja mucho que desear. Y sí, muy posiblemente no estarían de acuerdo en aperturar un mercado que beneficie al pueblo costarricense. Dichas declaraciones lo único que motivan es a que se mantenga a dos monstruos, a dos empresas grandes, a que tengan su mercado cautivo como ha estado toda la vida.
Y vienen elecciones…
-No importa. Si don Antonio Álvarez, considerando sus declaraciones, gana las elecciones, notablemente va a querer mantener a las dos empresas grandes: Cemex y Holcim, y proteger su mercado. Según se puede deducir de sus declaraciones, no consideraría yo que esté pensando en aperturar un mercado cementero.
¿Por qué se mete en esto Juan Carlos? ¿Qué hace usted en esta industria?
-Muy simple. De las personas de Grecia, algunos somos especiales, jupones, y con convicciones diferentes. Así lo siento. Es un tema de amor porque mi familia se desgasta, se preocupa, y hay muchos otros negocios que podía haber hecho. Yo me metí en este negocio porque haciendo el Dique de Nosara, en aquellos años, fui a cotizar a Cemex y Holcim y vi que lo tenían arreglado. Entonces me fui a comprar cemento en el exterior.
Ahí Juan Carlos Bolaños tiene las cotizaciones bajo llave como símbolo de un negocio al que desde un principio vio valor social, dice. Construía un dique en Nosara (Nicoya) encargado por la Comisión Nacional de Emergencias (CNE) por ¢991 millones, de un total de ¢3.777 millones adjudicado a la empresa de construcción de Bolaños entre 2010 y 2015.
Esto representa el 22% del total pagado por la entidad en adjudicaciones durante ese período. Sostiene que todo lo ha ganado en buena lid, ofreciendo plazos cortos y costos bajos, desde que empezó en el 2002 alquilando maquinaria para mover tierra en bananeras en Limón, según su relato. “Tengo 15 años de estar volando pala”.
Recuerda que al ver los resultados del cemento chino pensó en traerlo para vender, “para que los costarricenses prueben un cemento de mayor calidad y de mejor precio”. Además, era buen negocio, relata, pues la tonelada (equivalente a 20 sacos) producida aquí costaba $200 y traída de China costaba $100, incluyendo ya el transporte por el océano y los 1.200 camiones por cada barco, según sus números.
Es curioso que las actas del BCR en respuesta a Presidencia hablan específicamente de traer cemento de China.
-Porque es más barato.
Esa sería la preocupación del empresario, pero no una entidad pública. ¿Por qué el banco dice específicamente que quiere financiar cemento chino?
-Diay pregúntele al banco.
¿Entiende que genere dudas?
-Es falta de educación. China produce el 51% de cemento del mundo.
El acta del BCR también decía que apoyaría la importación de varilla desde China ¿Por qué no trae varilla?
-Sí, claro. De hecho, Abonos Agro ahorita, de manera muy correcta, es el mayor importador y les va muy bien.
¿Por qué no trae usted esa varilla?
-Yo no soy de metales. Soy de cemento.
Pero tampoco era de cemento y empezó a traer.
-Bueno, es que yo la compro a Abonos Agro.
¿Por qué no ha traído ni vidrio, ni PVC para aprovechar la ruta del cemento?
-Diay, no sé. Tal vez más adelante.
¿Va a seguir importando cemento?
-Sí.
¿Aunque lo ahoguen?
-No lo van a hacer. En off (fuera de grabación) te lo puedo comentar, pero hay socios interesados en que me mantenga importando cemento de China. Hay gente muy responsable que además de hacer plata piensa en un aporte social. Es desgastante leer tantas mentiras, pero sigo en esto.
¿No le da miedo?
-No, no sé a qué huele ni de qué color es el miedo.
Sabe que lo han seguido.
-Todos los días y toman fotos. ¡Qué vamos a hacer! Por lo menos en Costa Rica se modifican y alteran audios, pero no matan gente.
¿Si cambiara el paisaje político en el país, puede seguir en el negocio?
-Si el gobierno entrante no quisiera que haya importación tendríamos que discutirlo en un contencioso, como pasó a Cementos David…
… empresa que desapareció.
-Eso tendríamos que preguntárselo a ellos.
¿Ha financiado usted a algún político?
-No, porque no soy político.
¿Qué tendría de malo hacerlo?
-¿Si estoy pidiendo prestado a un banco para traer cemento, usted cree que voy a regalarla? Prefiero donarla en causas sociales.
¿Qué relación tiene con Mario Barrenechea?
-Lo respeto mucho; es un gran gerente
¿Siente culpa porque lo suspendieran?
-No tengo culpa. A él le montaron una cama Alberto Raven, Francisco Molina y otros directivos, y eso lo probaré. Don Mario no tiene relación con Sinocem y así se ve en el informe que recibió la junta sobre este crédito (…) Hay que ser un bruto para determinar que un crédito está en riesgo si faltan dos años y medio para pagar. Eso se esta pagando; está al día.
¿Usted ha ido a China?
-Claro, son muy atentos ellos.
Sí. ¿Pero quién le sirve de guía a usted?
-Es que es variado. Pero a uno lo van a recoger al aeropuerto.
¿Nadie de Costa Rica le ayuda a manejarse allá?
-Nadie. Yo llego y la gente de las fábricas me hace “tures”.
¿Cómo los contactó?
-Ah, buena pregunta. Desde 2010 importo maquinaria Liu Gong y el director regional es Day Wu Ping, que nunca ha sido mi empleado, como dicen; ha sido proveedor y nunca hemos sido socios. Tenemos buena relación y es una persona correcta.
¿Relación con Barrenechea hijo?
-Es una buena persona.
Pero ustedes tienen una relación comercial.
-No, a mí me encanta pagar con cosas. A veces con las constructoras pagó con maquinaria. Con él siempre ha habido una buena relación. Costa Rica es pequeña y él vende enchapes y nosotros construimos mucho. Le compro enchapes. Puede ser que venda el cemento que le doy en pago. Pago con cemento como moneda. A mí me sirve porque ya no tengo que sacar cash y así tengo una motivación para colocar producto.
¿Y eso se lo permiten? Yo le diría que me pague en dinero, no en sacos de cemento.
-Entonces yo le diría que vaya a contratar a otro lado. Estas no son épocas de abundancia. En ese esquema también me gusta colocar caballos. Es un mecanismo interesante.
¿Paga con caballos?
-Enamoro a la gente con el tema del caballo y a los constructores les fascina.