Una denuncia de última hora causaba hoy tensión en la víspera de unos comicios presidenciales en los que los colombianos elegirán al sucesor de Alvaro Uribe, quien dejará el poder el próximo 7 de agosto tras gobernar durante ocho años.
La denuncia fue hecha por dos candidatos, que acusaron a su rival oficialista Juan Manuel Santos de haberse reunido este viernes con un funcionario de la Registraduría Nacional del Estado Civil (RNEC), entidad encargada de organizar las elecciones y hacer el conteo de los votos, en un encuentro que despertó muchas suspicacias.
El aspirante del opositor Partido Liberal, Rafael Pardo, exigió una explicación sobre el encuentro de Santos con el presidente del sindicato de la RNEC, Daniel Bohórquez, que calificó de "irregular".
Germán Vargas, candidato de Cambio Radical, que simpatiza con el gobierno, también pidió explicaciones y aseguró que eso indica que no están dadas las garantías para las elecciones.
"¨Qué propósito tuvo esa reunión?, ¨de qué se habló?, ¨qué importancia tenía?, ¨por qué no acudió a las instancias adecuadas? (...) Yo insisto en que la cabeza de esa entidad es el registrador y no el presidente de un sindicato con antecedentes", dijo Vargas.
Santos, candidato del gobernante Partido Social de Unidad Nacional, dijo que se reunió con el sindicalista para hablar sobre mecanismos de trasparencia, pero sus rivales coincidieron en que ese tipo de reuniones se hace con el titular de la RNEC.
El jefe de la RNEC, Carlos Ariel Sánchez, expresó malestar por lo ocurrido y dijo que estudia medidas disciplinarias. Además, cuestionó que la reunión del presidente del sindicato y Santos no se haya hecho en la sede del organismo sino en un restaurante.
Por otra parte, las autoridades reportaron que los 350.000 efectivos de la fuerza pública dedicados a la vigilancia de la jornada electoral tienen todo bajo control, aunque en los últimos días se han presentado ataques de las Fuerzas Armadas Revolucionarias de Colombia (FARC).
Encuestas conocidas en las últimas semanas indican que ningún candidato obtendrá mañana la mitad más uno de los votos para ser declarado como vencedor, por lo que los dos con más sufragios tendrán que enfrentarse en una segunda vuelta el 20 de junio.
Los sondeos indican que quienes llegarán a esa instancia serán Santos y Antanas Mockus, del Partido Verde.
Santos, periodista, economista y administrador de empresas de 58 años, pregona la continuación de las políticas aplicadas por Uribe, de quien fue ministro de Defensa, especialmente en el sector de la seguridad, mediante la ofensiva del Ejército y la Policía contra las FARC.
Mockus, filósofo y matemático de 58 años, de origen lituano y dos veces alcalde de Bogotá, defiende campañas pedagógicas sobre el respeto a la vida y el cumplimiento de las leyes, por lo que afirma que su gobierno pasará de la "seguridad democrática", el emblema de Uribe, a la "legalidad democrática".
La última encuesta que por normas electorales se pudo publicar, el 21 de mayo, indicó que Mockus obtendría en una segunda vuelta el 45 por ciento de los votos y Santos el 44, sobre un margen de error del 2,89 por ciento.
El sondeo, elaborado por la firma Datexco, indica que en la primera vuelta de mañana un 35 por ciento votaría por Santos y un 34 por ciento por Mockus, por lo que ambos tendrían que disputar la presidencia el 20 de junio.
Después aparecen Noemí Sanín (nueve por ciento), del cogobernante Partido Conservador; Gustavo Petro (cinco), del opositor Polo Democrático Alternativo; Germán Vargas (tres), del oficialista Cambio Radical; y Rafael Pardo (dos), del opositor Partido Liberal.
Según la RNEC, casi 30 millones de colombianos mayores de 18 años están habilitados para votar, de los cuales se espera que al menos 16 millones acudan a las urnas.
Las urnas se abrirán a las 13:00 horas GMT y se cerrarán a las 21:00 GMT. Sánchez prometió que el resultado de los comicios, con casi el 100 por ciento del conteo de votos, se conocerá unas tres horas después del cierre de las mesas.
Unos 50 observadores de 20 países y de diversas organizaciones se distribuirán por diferentes regiones para verificar la transparencia del proceso, en una actividad que despierta gran expectativa ante denuncias de fraude hechas en los comicios parlamentarios.