En un caso similar al de David Trezeguet, Gonzalo Higuaín bien podría estar defendiendo la camiseta de Francia en la Copa Mundial de la FIFA Sudáfrica 2010. El delantero, hijo del ex jugador Jorge Nicolás Higuaín, nació en suelo galo, más precisamente en Brest, cuando su padre se encontraba cumpliendo tareas profesionales. Sin embargo, pese al ofrecimiento por parte de Raymond Domenech para jugar un amistoso en noviembre de 2006, el actual goleador del Real Madrid prefirió aguardar por un llamado para defender la camiseta albiceleste.
Durante su infancia pasó apenas 10 meses en suelo francés, territorio que no volvió a pisar hasta 1998. En aquella oportunidad, su padre se desempeñaba como espía de los rivales del seleccionado argentino que competía en la Copa Mundial de la FIFA. El entrenador era Daniel Passarella, quien ocho años más tarde le daría continuidad y renombre a Gonzalo en la primera división de River Plate.
El Pipita, tal como se lo apoda desde pequeño, presenta características opuestas a las del padre: es un delantero veloz, picante y capaz de definir con ambos perfiles. Su crecimiento profesional ha resultado meteórico, tal como indica que el Real Madrid lo quisiera fichar cuando llevaba menos de un año en el primer equipo de River Plate. Luego, durante tres años en la Casa Blanca, tuvo que competir con futbolistas de la talla de Ronaldo, Raúl, Ruud van Nistelrooy, Arjen Robben, Rafael van der Vaart, Javier Saviola y Karim Benzema, por sólo mencionar algunos. Desplazó a todos.
Para exponer su capacidad manifiesta de gol, alcanza con revisar algunos números: con la camiseta riverplatense jugó apenas 35 partidos y convirtió 13 tantos, dos de ellos clave para definir su primer Superclásico ante Boca Juniors en la temporada 2006. Ya con la camiseta madridista, Gonzalo se ha superado a sí mismo temporada a temporada, sobrepasando recientemente los 22 goles celebrados en 2008/2009. La cuenta total arroja más de 56 tantos en poco más de 100 partidos, un promedio que envidiaría cualquier delantero del mundo.
Su historia con la selección es mucho más reciente. A diferencia de otros futbolistas, no cuenta con antecedentes en los seleccionados juveniles. Convocado para entrenarse con un equipo Sub-18, Gonzalo no pudo asistir por no contar con documento argentino. Ya en 2007, tras rechazar el ofrecimiento del combinado francés, su nombre sonó con fuerza para participar tanto de la Copa Mundial Sub-20 de la FIFA como de la Copa América, superpuestas en el calendario. Sin embargo, no formó parte de ninguno de los dos planteles.
Ya en 2009, tras jugar encuentros amistosos con el combinado Sub-23, Gonzalo recibió el esperado llamado de Diego Maradona para el equipo mayor. Y no defraudó: anotó un tanto frente a Perú durante las eliminatorias y otro para derrotar a Alemania en un amistoso disputado en marzo. Espera mantener su eficacia en Sudáfrica.